CORONAVIRUS:

Tarija: HRSJD sin espacio, sin oxígeno y a punto de cerrar una sala UTI

Las 23 camas de terapia intensiva están copadas, hay pacientes en espera y el retiro del personal con contratos AISEM podría generar en el cierre de una sala UTI. Además, la planta de oxígeno no abastece, detalló Roberto Mérida, jefe del HRSJD.

La pandemia del coronavirus (Covid-19) ha puesto al tope la sala de emergencia y la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital San Juan de Dios (HRSJD) de la ciudad de Tarija, que al momento se encuentra atravesando una crisis debido a la falta de espacio, falta de oxígeno y con el 80% del personal de salud a punto de dejar sus fuentes laborales por que no reciben sus salarios.

Roberto Mérida, jefe de la Unidad de Terapia Intensiva del HRSJD, en entrevista con PlusTLT informó que el 80% del personal de salud que trabaja en el hospital, con contratos de la Agencia de Infraestructura en Salud y Equipamiento Médico (AISEM), podrían dejar sus fuentes laborales el día lunes

Por otro lado, todas las camas UTI se encuentran ocupadas y hay alrededor de 6 pacientes que esperan un espacio, sin embargo, la escasez de oxígeno impide habilitar ocho nuevas camas, como lo habían previsto anteriormente las autoridades en salud.

El retiro de este personal de salud podría originar el cierre de una de las salas de Terapia Intensiva, es decir, reducir de 23 camas UTI a 13,- dijo Mérida- situación que podría derivar en un desenlace “catastrófico” para el hospital y la población de Tarija.

De acuerdo a Jefe médico, la planta generadora de oxígeno recientemente instalada no estaría produciendo la cantidad que requiere el hospital, además que la empresa Oxisur habría tenido un desperfecto.

“Teníamos que abrir 8 camas más pero no hay oxígeno y no hay personal (…) la falta de oxígeno nos sigue molestando, nos están dando la mitad de lo que nos tenían que dar nuestra propia planta, aparentemente trabajaba produciendo 180 tubos por día, ayer apenas han traído 64 y nosotros requerimos 250 a 264 tubos día”, mencionó.

Mérida explicó que en la sala de emergencia hay cuatro personas menores de 50 años que necesitan de una cama UTI pero no pueden ser trasladados porque no hay espacio, algunos otros habrían decidido ir a una clínica privada por la desesperación. “Nos dejan atados de manos porque no tenemos respuesta en cuanto a lo que se refiere al personal”.

Fuente: El País