Tarija: capacidad de terapia intensiva del San Juan de Dios se redujo a la mitad por falta de contratos

La secretaria de desarrollo humano de la gobernación de Tarija, Dra. María Lourdes Vaca, informó que la capacidad ocupacional de la unidad de terapia intensiva del Hospital Regional San Juan de Dios se redujo a la mitad, debido a la falta de renovación de contratos por parte del nivel central del Estado.

“Los contratos Aisem concluyeron hace dos semanas, no hay renovación y eso nos preocupa bastante porque  afecta directamente al hospital San Juan de Dios. Más de 68 contratos y más de un centenar a nivel departamental, lamentablemente no se renovaron y eso significa que tenemos que cerrar la mitad de la atención en terapia intensiva”.

Estos contratos son financiados con recursos de la cooperación internacional y es competencia del Gobierno Nacional hacer las gestiones que correspondan para la recontratación del personal. En este momento están habilitadas 13 de las 23 camas instaladas en la UTI del hospital. 

La autoridad informó que el ejecutivo departamental renovó 629 contratos que se financian con recursos departamentales, pero que tienen que ser complementados con los contratos del nivel central, de lo contrario, será muy difícil cubrir las atenciones necesarias si se incrementa el número de pacientes que ingresen a la unidad de terapia intensiva.

“Nosotros como gobierno departamental cumplimos, pero además estamos en proceso de reordenamiento institucional, de los 629 ítems que cubre el gobierno departamental, 338 se van a los municipios, es decir, estamos absolviendo responsabilidades que no son nuestras”.

Vaca dijo que este es otro motivo más para insistir con la vacunación contra el COVID-19 , detalló que Tarija tiene 147 mil dosis disponibles para la primera dosis y 19.200 vacunas para la segunda dosis de Sputnik V en todos los centros habilitados en el departamento: “La única forma certificada a nivel mundial es la vacunación, estamos vacunados a un 67% a nivel departamental, tenemos que llegar a nuestra meta del 80% en primera y segunda dosis, y esa será la púnica forma para que nuestra gente no caiga en terapia intensiva”.