La Gobernación de Tarija tiene menos ingresos que las alcaldías y más competencias nacionales
Los gobiernos departamentales nacieron a la vida con muchas responsabilidades del nivel central, pero sin la asignación de recursos, admitió el Gobernador Oscar Montes.
La gobernación, al igual que sus similares del interior del país, tiene menos ingresos económicos que los municipios, pero más responsabilidades o competencias transferidas por el nivel central.
“Ya nosotros en estos momentos tenemos menos plata que las alcaldías, eso ya viene ocurriendo hace unos años”, confirmó el Gobernador Oscar Montes Barzón al admitir que eso tendrá consecuencias complicadas para los gobiernos departamentales del país.
Estos gobiernos departamentales nacieron a la vida con enorme cantidad de responsabilidades, pero sin la asignación de un presupuesto, en el caso de Tarija, se vive con sus Regalías por la venta de gas, que debería ser un capital de ahorro, explicó Montes.
Con las Regalías está cubriéndose competencias o responsabilidades del nivel central, en educación paga hasta bonos, de vacuna, hasta 7 millones de bolivianos por año, que debería ser competencia nacional, pero lo cargaron a las gobernaciones, cuestionó.
“Lamentablemente en su momento, las gobernaciones aceptaron”, lamentó al añadir responsabilidades como la vivienda social, incluso caminos. Con qué van a pagar si no han asignado recursos. “Es necesario hacer un nuevo pacto fiscal en Bolivia”.
De no mejorar esta situación, los departamentos condenarán a una serie de programas sociales de beneficio para la población, salud y educación, agregó al criticar el pago por las gobernaciones la alimentación de presos en las cárceles.
Incluso los servicios básicos de las cárceles, otra competencia nacional, al igual que la atención a las personas víctimas de violencia familiar, “a las mujeres, niños, tenemos que darles vivienda, vestido, alimentación, todos los días, criticó.
Todas esas obligaciones Tarija está cumpliendo con dinero propio, sus Regalías, que están empezando a desaparecer y es probable que se deje sin atención a enormes sectores muy vulnerables de la población, hay varias cargas sociales, siguió.
Sin dinero significa que esos sectores sociales quedarán desamparados financieramente, advirtió la autoridad cuya gestión está priorizando cuatro programas, la canasta alimentaria, el Prosol, los ítems de salud y el 1% para los municipios.
EL DATO
Prácticamente desde el inicio de la gestión del anterior gobernador, Adrián Oliva Alcázar, se buscó lograr un nuevo pacto fiscal en Bolivia, sin resultados, el gobierno de entonces lo eludió con diversos argumentos a pesar de estar legislado.
No solo que no hubo nuevo pacto fiscal, sino que permanentemente fue transfiriendo más competencias nacionales para ser cubiertas con el IDH, pese a las objeciones y denuncias locales, de confiscación de sus recursos.
Fuente: El Periódico