En Bolivia, 8 de cada 10 estudiantes de primaria no entienden lo que leen ni resuelven problemas aritméticos simples
El 74% de los estudiantes de tercer grado en Bolivia se encuentran en los niveles de rendimiento más bajos, quedando muy por detrás del promedio latinoamericano.
El 74% de los estudiantes de tercer grado en Bolivia se encuentran en los niveles de rendimiento más bajos, quedando muy por detrás del promedio latinoamericano.
En Bolivia, la crisis de la educación es tal que ocho de cada 10 estudiantes de primaria, en diversos cursos, no entiende lo que lee ni resuelve los problemas aritméticos previstos para esa edad.
El 74% de los estudiantes de tercer grado en Bolivia se encuentran en los niveles de rendimiento más bajos, quedando muy por detrás del promedio latinoamericano. Entre los estudiantes de sexto grado, casi el 85% tiene dificultades para comprender lo que lee y carece de la capacidad para establecer conexiones o interpretar e inferir significados, dice el estudio “La Situación Social de Bolivia”, editado recientemente por la Fundación Milenio.
El informe agrega, citando los estudios del especialista Ernesto Yáñez, que en matemáticas, ocho de cada 10 estudiantes de tercer grado y dos tercios de los de sexto grado se sitúan en los niveles de rendimiento más bajos, lo que significa que nuestros estudiantes carecen de las habilidades necesarias para resolver problemas matemáticos básicos”.
El informe de Milenio revela la dura realidad relacionada con la educación, con una gran mayoría de niños y adolescentes que asisten a las escuelas en el país sin poseer los niveles mínimos de competencia en materias básicas necesarios para su desarrollo educativo.
Basándose en las mediciones del Tercer Estudio Comparativo y Explicativo de la UNESCO, el especialista en estadísticas educativas y coautor de la investigación de Milenio, Ernesto Yáñez, afirmó que la situación de la educación es dramática.
A partir de estos datos y con la evidencia del agravamiento del problema durante la pandemia, el informe de Milenio concluye que “La mala calidad de la educación, el rezago en aprendizajes básicos y las desigualdades en oportunidades educativas están hipotecando el porvenir de las nuevas generaciones y la deficiente preparación de los estudiantes podría dejarlos en el futuro fuera del mercado laboral o limitados a trabajos precarios y con escasas posibilidades de progresar en sus vidas”.
Crisis educativa
Al identificar la alta incidencia de factores como la formación de maestros, el rezago tecnológico, la desigualdad y la ausencia de políticas educativas sostenidas, la investigación concluye que el principal problema para la educación en Bolivia es la falta de calidad, que se expresa primordialmente en una crisis de aprendizaje.
“Los logros de aprendizaje se han deteriorado significativamente, sobre todo entre los estudiantes más vulnerables. Esto implica que los estudiantes de escuelas públicas, del área rural e indígenas profundizarán aún más su falta de competencias fundamentales en lectoescritura y aritmética”, señala el estudio.
Según Milenio, la crisis de aprendizaje ha persistido a pesar de los avances en la cobertura educativa y la matrícula estudiantil, y se ve exacerbada por los efectos de la pandemia, lo que ha generado muchas carencias y brechas en la educación boliviana.
“El aumento de la tasa de reprobación en 2021 es una señal de que una mayor pérdida de aprendizaje está agudizando los rendimientos deficientes. También se advierte que la probabilidad de abandono, sobre todo de alumnos de secundaria, ha aumentado”, advierte la entidad.
Formación de docentes
Otro gran desafío identificado por la investigación es la formación de docentes. “Salvo honrosas excepciones, los docentes se caracterizan por un bajo conocimiento, prácticas pedagógicas poco efectivas y serios problemas de motivación, liderazgo y orientación en el proceso de aprendizaje. El rezago educativo y la crisis de aprendizaje tienen mucho que ver con esta realidad”, señala.
La crisis educativa explica que el país no forme recursos humanos capacitados para integrarse a la economía del conocimiento y el cambio tecnológico. Esto, en el mundo de hoy, donde el recurso más valioso es el capital humano, hace mucho más difícil que Bolivia avance hacia el desarrollo, concluye el informe.
Fuente: Brújula Digital