Reactivación: créditos superan los Bs 141 millones y se extienden a agropecuarios

Banco Unión y el BDP colocaron 1.290 créditos, un 97% de las operaciones tocan a microcrédito. Productores califican de acertada la decisión de incluir al sector agropecuario en el programa estatal

En el marco del plan de reactivación, los bancos Unión y de Desarrollo Productivo (BDP) han colocado 1.290 créditos por un monto de Bs 141 millones. El 97% de las operaciones corresponde a microcrédito y a través del Decreto Supremo (DS) 4509 se amplió la cobertura crediticia al sector agropecuario del país.

En diciembre de 2020, el régimen actual de Gobierno del presidente Luis Arce Catacora promulgó el DS 4424 mediante el cual se creó el Firedin, con un monto de Bs 911 millones, para créditos con una tasa de interés del 0,5% y plazos de cinco a 10 años para capital de inversión y tres años para capital de operaciones.

La ampliación del DS 4509 al sector agropecuario fue aprobada por el gabinete de ministros y establece que podrán acceder a los créditos SíBolivia para la producción de alimentos y materia prima destinada a la sustitución de importaciones desde la producción primaria, principalmente alimentos para abastecer al mercado interno, la producción de trigo y algunas variedades de frutas.

“Hemos escuchado la demanda del sector agropecuario, porque este fideicomiso estaba destinado a la transformación de materia prima. Ahora la cobertura se amplía a la producción primaria. En este caso, proveedores de materia prima y el sector agropecuario necesitan acceder a este fidecomiso. Ahora vamos a apoyar a este sector”, explicó el ministro de Desarrollo Productivo, Néstor Huanca.

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La autoridad explicó que uno de los sectores productivos beneficiados con la norma es el triguero, tomando en cuenta que el Estado busca ser soberano en la producción de ese cereal.

Así, el Gobierno, a través de la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa), incentiva la producción de trigo con un precio de compra referencial de $us 335 la tonelada para la campaña agrícola de invierno de la presente gestión.

Los beneficiarios de los sectores que soliciten los créditos productivos destinados a la sustitución de importaciones y la provisión de materia prima deben contar con el Régimen Agropecuario Unificado (RAU), requisito básico exigido.

Para operación e inversión

El gerente general de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), Jaime Hernández, considera acertada la decisión de incluir a los productores agropecuarios como beneficiarios a este crédito con la finalidad de sustituir importaciones. “Permitirá que se pueda contar con financiamiento para capital de operación y de inversión para la producción de trigo o maíz, granos que aún se importan”, insinuó.

El presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO, Óscar Mario Justiniano, cree que se hizo lo correcto porque el sector productivo no podía estar excluido de un incentivo en la sustitución selectiva de importaciones, dado que, según advierte, compiten en desigualdad de condiciones con productos importados y que ingresan por contrabando al país.

Sin embargo, refirió que es necesario tener la letra pequeña de la norma porque, como está planteado el crédito, exige garantías reales, requisito que no podrán generar los pequeños agricultores dado que su unidad productiva es inembargable. “Si el crédito va a estar sujeto a garantías reales, no tendrá el impacto que se requiere en los pequeños productores, dado que; por ejemplo, un 85% de afiliados a Anapo son pequeños productores”, puntualizó Justiniano.

Para el gerente general del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, es destacable la determinación de ampliar la cobertura del programa SíBolivia al sector agropecuario deduciendo que bien administrada puede ayudar a disminuir la importación de alimentos, trigo en grano y harina de trigo, cuya importación en 2020 significó para el país un gasto de $us 153 millones por casi medio millón de toneladas.

Fuente: EL DEBER