¿Por qué le llamaban ‘El Kaiser’ a Franz Beckenbauer? Así revolucionó el fútbol su posición de líbero

El enigmático apodo “Kaiser” asociado a Franz Beckenbauer, leyenda del fútbol alemán cuya muerte ha dejado consternado a todo al mundo del deporte internacional, se ha convertido en el epicentro de una prolongada disputa acerca de su origen. Según la primera versión, arraigada en el folclore popular, durante un amistoso entre su Bayern de Múnich y el Austria de Viena en 1971, Beckenbauer fue fotografiado junto a una estatua del antiguo emperador (Kaiser en alemán) austríaco Franz I en el Palacio Imperial Hofburg de la capital austríaca. Un artículo posterior etiquetó al futbolista como el “Kaiser”, un término que ha perdurado en la memoria colectiva desde el 3 de agosto de 1971.

No obstante, emerge una segunda versión del diario alemán Welt am Sonntag, miembro del grupo editorial alemán Axel Springer Verlag, que remonta el origen del apodo a 1969. Tras la conquista del primer título de Bundesliga por parte del Bayern, el diario Bild, perteneciente al mismo grupo editorial, lo proclamó como el “Kaiser de la nación” el 10 de junio de 1969.

La controversia persiste, con Axel Springer Verlag reclamando la atribución del título. En medio de estas narrativas, una anécdota reveladora añade más capas a la historia: en la final de la Copa de Alemania de aquel año ante el Schalke, Beckenbauer respondió a los abucheos del público sosteniendo la pelota en el aire y bromeando a la vez con los fanáticos mineros, un acto interpretado como una afrenta al “Rey de Westfalia”, añadiendo un matiz más a la enigmática historia del “Kaiser” alemán.