La izquierda frena a la extrema derecha en Francia

Jordan Bardella, junto a Marine Le Pen en París, Francia. — TERESA SUAREZ / EFE/EPA

La victoria del Nuevo Frente Popular (173 diputados) junto al resultado de la coalición de Macron (142) sobre Agrupación Nacional (139) lleva a un escenario de gran coalición o una Asamblea bloqueada. El primer ministro ha dimitido y Mélenchon ya ha pedido un primer ministro de izquierdas.

Sorpresa absoluta en la segunda vuelta de las elecciones legislativas en Francia, a falta de 17 escaños por asignar. La extrema derecha de Le Pen (Agrupación Nacional, RN) no solo no logra la mayoría absoluta, sino que sería la coalición de izquierdas (Nuevo Frente Popular) quien se alzaría con el primer puesto.

Según datos del Ministerio del Interior, tras la segunda vuelta de las elecciones, los resultados son: 173 diputados para el NFP, 142 para el bloque macronista, 139 para la formación liderada por Marine Le Pen, y 66 para LR y sus aliados.

Esas cifras suponen una sorpresa después de que la ultraderecha ganara de forma holgada la primera vuelta, con el 33,15% de los votos, y seguía en cabeza tanto en los sondeos como en las últimas proyecciones de escaños que se divulgaron hasta el viernes, último día de la campaña.

El NFP alcanzaría una mayoría relativa sin llegar a los 289 escaños necesarios para la mayoría absoluta. De esta forma, podría constituirse un Ejecutivo de unidad nacional que incluya a macronistas, a la derecha tradicional y al bloque de izquierda -pero la Francia Insumisa de Mélenchon se opone a esta idea-.

Macron analiza los resultados y Attal presentará su dimisión

La Presidencia francesa ha informado que Macron está "analizando los resultados" y esperará a conocer la composición final del Parlamento antes de tomar decisiones. "El presidente, como garante de nuestras instituciones, respetará la elección de los franceses", añade el comunicado, indicando que no se esperan declaraciones este domingo.

Sin embargo, los resultados estimados ya han tenido sus primeras consecuencias. El primer ministro, Gabriel Attal, ha anunciado que "mañana por la mañana" presentará su dimisión a Macron. "Ser primer ministro es el honor de mi vida (...). Asumiré mis funciones mientras sea necesario", ha afirmado. 

Mélenchon: "Macron debe inclinarse y aceptar su derrota"

Por su parte, el líder de la izquierda, Jean-Luc Mélenchon, ha comparecido nada más hacerse públicos los sondeos para exigir a Macron el nombramiento de un primer ministro de la alianza de izquierdas. "Macron debe inclinarse y aceptar su derrota", ha dicho.

Mélenchon insistió en que el jefe de Gobierno debe ser del Nuevo Frente Popular, la coalición izquierdista que incluye a La Francia Insumisa, socialistas, comunistas y ecologistas. Asimismo, recalcó que el nuevo gobierno deberá implementar exclusivamente su programa y rechazó negociar con la coalición de Macron.

Mientras, el Partido Socialista francés, que en estas elecciones legislativas acudió a las urnas en la coalición de izquierda, advirtió de que la izquierda no tolerará ninguna "coalición de contrarios que vaya a traicionar el voto de los franceses y prolongar las políticas macronistas". "Francia merecía más que la alternativa entre neoliberalismo y fascismo", ha concretado su secretario general, Olivier Faure.

La frustración de Bardella y Le Pen ante la eficacia del cordón sanitario

Mientras tanto los ultraderechistas mostraron su frustración por los resultados obtenidos. Mucho peores de lo que les pronosticaban las encuestas. Ante los malos presagios, los franceses han resistido y han dicho no a Le Pen y no a Bardella. 

Marine Le Pen, líder de Reagrupamiento Nacional, en declaraciones a la TF1, evaluó los resultados y describió la situación como "insostenible" para Macron. Además, lamentó que su partido haya sido bloqueado por un cordón sanitario acordado entre la izquierda y los centristas.

Le Pen anticipó, en línea con su discurso ultra, "más años de inmigración y pérdida de poder adquisitivo", resignándose a la situación actual. Y agregó: "Pero si hay que hacerlo así..."

Jordan Bardella, el delfín de la ultraderechista, habló de la "alianza del deshonor" tejida por Macron y Attal y "sus arreglos electorales con la extrema izquierda" que habrían privado a los franceses del enderezamiento político. A Bardella los sondeos le daban como el primer ministro más probable. 

El ex primer ministro de Macron: "Ni con RN, ni con LFI"

Édouard Philippe, ex primer ministro con Macron y líder de Horizons, evaluó los resultados iniciales de las elecciones francesas, destacando la necesidad urgente de formar una coalición para garantizar la estabilidad gubernamental. Philippe instó a otras fuerzas políticas a unirse, dejando claro que no buscará acuerdos ni con la extrema derecha ni con la izquierda radical representada por LFI.

Subrayó que la estabilidad del gobierno no podrá alcanzarse "ni con RN, ni con LFI", el partido con mayor número de escaños dentro del Nuevo Frente Popular. Y también comentó que la convocatoria electoral de Macron, diseñada para clarificar el panorama político, ha generado más confusión de la esperada: "No me sorprende", concluyó.

Reacciones políticas en España: "Éxito del cordón sanitario"

En España, varios líderes políticos han celebrado la victoria de la izquierda. Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE, celebró el "éxito del cordón sanitario de toda la izquierda frente a la ultraderecha en Francia". Cerdán destacó en 'X 'que esto es "una gran noticia para los demócratas y para Europa", subrayando la importancia de defender los derechos y combatir el odio y las mentiras.

También Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno y líder de Sumar, celebró la victoria de la izquierda en las elecciones legislativas francesas, afirmando que "donde hay esperanza, no triunfa la extrema derecha". Destacó que el triunfo del Nuevo Frente Popular es una buena noticia para Francia, Europa y la democracia.

Ione Belarra, líder de Podemos, apuntó a la derrota del fascismo, instando al Nuevo Frente Popular a implementar su programa sin macronismo. 

FUENTE: PÚBLICO