La crisis en el hospital de Yacuiba afecta a los recién nacidos
De una capacidad de atención de 7 recién nacidos actualmente hay 17 en la sala de neonatología del hospital Rubén Zelaya. A ello se debe agregar que no existe en servicio un profesional de esa especialidad, sólo una enfermera atiende a todos los niños. Esa es la actual crisis en el hospital de Yacuiba que afecta a la atención en salud de los recién nacidos, develó el director del hospital Oscar Aliaga.
La queja de la autoridad se suma a la expresada por el personal que, a inicios de esta semana, reiteró la urgente necesidad de solucionar la falta de personal para la atención en neonatología y pedriatía. Son dos servicios sensibles que se atiende en el hospital del Gran Chaco, pese a ser de segundo nivel.
“El servicio tiene tres turno cada día y hay tres licenciadas contratadas para cada turno. Resulta que ahora dos han dado positivo dejando solo una profesional por turno. Ya hicimos la solicitud en una reunión con un equipo científico que envió la red de salud, pero hasta ahora no hay respuesta”, detalló Aliaga.
La falta de personal ha obligado a suspender sus vacaciones pendientes desde el 2019. Por eso Aliaga informó sobre el retorno a sus funciones luego de haber iniciado un descanso el pasado 23 de diciembre.
Recuerda que el mismo mes sostuvieron varias reuniones con las autoridades de salud, donde se tocó el tema del requerimiento de recursos humanos, pero hasta la fecha no hay respuestas.
“Incluso, a nivel municipal se contrató 4 especialistas por el lapso de un año, entre ellos de pediatría, internista y nefrólogo. Pero no les han renovado su contrato que se venció el 31 de diciembre”, dijo.
A mitad de la pasada gestión ese centro hospitalario contaba con 50 enfermeras que se vieron disminuidas a 30 a finales de noviembre. Días después los casos covid-19 en Yacuiba, nuevamente comenzaron a presentarse.
SIN ESPACIO EN NEONATOLOGÍA
La responsable de enfermería del hospital, Olga Poma, calificó de estado de emergencia la situación que se observa al interior de la unidad de neonatología. La sala está totalmente llena. No hay espacio en las incubadoras ni en las camitas, donde se brinda el cuidado especializado a los recién nacidos.
“Encima de ello, solo tenemos una licenciada enfermera para la atención de los neonatitos. Cuando la norma dice que se debe tener una enfermera por cada niño. Ellos son prematuros y están en terapia, algunos no respiran por si solos y deben ser asistidos de oxígeno y un monitor de signos vitales”, puntualizó Poma.
Situación similar se presenta en la sala de pediatría, donde hay 11 camas llenas. En otra sala y aislado hay 3 camas con pacientes menores con covid-19. Las licencias enfermeras que atendían en esta unidad, fueron trasladadas de parte de la Gobernación regional del Gran Chaco, al hospital Fray Quebracho, donde solo existe atención a los enfermos de coronavirus.
Fuente: El Chaco Alerta