Gobierno ofrece ablandar exigencia de vacunas en medio de amenazas

Sectores afines al MAS se movilizaron en Potosí y en La Paz para exigir la anulación del carnet de vacunación. El ministro de Salud no descarta nuevo cambio en la norma

La exigencia del carnet de vacuna ya fue flexibilizada hasta el 26 de enero, pero eso no logró reducir las protestas protagonizadas en gran medida por organizaciones sociales vinculadas al Movimiento Al Socialismo (MAS). Ahora, el ministro de Salud, Jeyson Auza, abre la posibilidad de hacer una nueva concesión en medio de las elevadas cifras de contagio.

“Hemos dado un plazo hasta el día 26, pero de ser necesario el Consejo Nacional Estratégico de Emergencias Sanitaria va a sesionar y va a definir qué adecuaciones se puede hacer a esa normativa”, afirmó la autoridad para referirse a los decretos 4640 y 4641 que permitieron la creación del carnet de vacuna y la base legal para los controles que comenzaron el 3 de enero y que se ejecutaron solo durante cuatro días, debido al rechazo de varios sectores sociales.

La autoridad destacó que “más de 700.000 personas se han inmunizado” mientras existía la exigencia del carnet para ingresar a bancos y dependencias públicas en todo el territorio nacional, pero reconoció que existen varias organizaciones aliadas al MAS que están contra esas normativas.

“Es una situación dura y es incómodo estar siendo cuestionado por nuestras mismas organizaciones; sin embargo, hemos hecho un compromiso con todo el pueblo boliviano y no con una organización específica para defender la vida”, afirmó el ministro.

Desde que los decretos se pusieron en marcha, dirigentes de los interculturales, maestros del trópico de Cochabamba, campesinos y representantes indígenas del Norte de Potosí anunciaron medidas de presión para exigir la abrogación de esas normativas.

De hecho, una multitudinaria movilización tomó las calles de La Paz el lunes y llegó hasta la Casa Grande del Pueblo para pedir la abrogación de los dos decretos. Esa protesta fue convocada por el líder de los gremialistas de El Alto, Antonio Siñani, pero se plegaron otros sectores, entre ellos líderes evangélicos como el pastor Luis Aruquipa, de Iglesias Unidas.

Además, la federación Tupac Katari de Trabajadores Campesinos de La Paz se movilizó ayer hasta el Ministerio de Salud para exigir la anulación de los decretos y la destitución del ministro Auza.

El secretario general de esta organización campesina, Pedro Laura, señaló que ellos respetan la vida, la salud y la bioseguridad, pero no quieren estar obligados a vacunarse. “Nos están discriminando. El ministro no ha consultado, no ha consensuado; ha sorprendido al pueblo”, afirmó.

La federación Tupac Katari es una de las más influyentes en el MAS y es la organización a la que está adscrito el vicepresidente David Choquehuanca, quien recibió su primera dosis tras la exigencia planteada por esos decretos. La autoridad ahora se recupera, tras haber dado positivo para Covid. 

Pero ayer la mayor amenaza vino desde el Norte de Potosí. Allí tuvo lugar un ampliado de la Federación de Ayllus de esa región que asumió una decisión sobre la base de sus usos y costumbres reconocidos por la Constitución. El mallku José García Mamani informó que se aprobó una resolución que plantea un ultimátum para que se abroguen los decretos.

“Estamos pidiendo la inmediata abrogación de los decretos 4640 y 4641. Estamos dando un plazo de 24 horas a partir de la fecha, pues hemos aprobado el rechazo total al pedido de carnet de vacuna y la inmediata destitución del ministro de Salud”, aseguró.

La autoridad indígena señaló que en la resolución aprobada se exige al Gobierno aplicar políticas reales para “la revalorización de la medicina tradicional y la incorporación de médicos tradicionales con sus ítems en cada centro de salud del país”. Aseguró que su sector ha superado las primeras tres olas de la pandemia con el uso de yerbas y saberes ancestrales.

Consultado sobre las medidas que asumirá su sector en caso de que el Gobierno no acepte los términos de la resolución aprobada, García manifestó que “se aprobarán las medidas del caso como manifestaciones de protesta y bloqueos de caminos”.

“Hay mucha preocupación. No sé si como ministros están trabajando, bajando a las bases, socializando, porque no nos han tomado en cuenta. Estamos molestos porque nos están obligando a vacunarnos. Esta suspensión hasta el 26 no estamos de acuerdo”, apuntó el dirigente.

Desde que Evo Morales llegó al poder por primera vez en 2006, el MAS no ha perdido ninguna elección en el Norte de Potosí. “Hemos dado línea al Estado Plurinacional y esta no será la excepción”, apostilló García.

El viceministro de Coordinación con Movimientos Sociales, Juan Villca, expresó su preocupación por las posiciones de estos sectores afines al oficialismo y anunció que esta temática se analizará en la reunión de gabinete de hoy. Anticipó que se decidió “fortalecer” las tareas de socialización del alcance de los decretos y los beneficios de la vacunación. 

“El ministerio de Salud, como cabeza de sector y en coordinación con otras unidades, estamos llevando adelante un proceso de socialización. Estamos reforzando la difusión. Hay varios sectores que han salido a las calles censurando y cuestionando estos decretos. Nos corresponde socializar a partir de una agenda en los nueve departamentos”, dijo. 

Villca señaló que se está oficializando las invitaciones para dialogar con todos los sectores afines al Gobierno. Lamentó que existen varios grupos que han rechazado ser parte de estas conversaciones. “Esa es la prioridad, pero hemos recibido respuestas políticas, pidiendo que se vaya el ministro y se abroguen los decretos”, lamentó la autoridad del Ejecutivo.

Las tensiones entre organizaciones sociales que son aliadas del Gobierno estallaron en momentos en los que el MAS emitió varias señales de pugnas internas por el control de los ministerios y entidades del Estado. El líder del partido, Evo Morales, llegó pedir públicamente un ajuste en el gabinete político, pero luego aclaró que esa será una decisión privativa del presidente Luis Arce.

Eso sí. El fin de semana, Morales recordó que en 2021 el Gobierno retrocedió en las leyes relacionadas a la política de lucha contra el lavado de activos. “Me ha dado pena que algunos técnicos en las leyes donde se ha retrocedido. Algunos dirigentes se mandaban la parte, porque el técnico no conocía siquiera”, afirmó el político.

“Como expresidente, como presidente del MAS, si (Arce) requiere nuestra participación, haremos nuestras propuestas que terminan en sugerencias. Cualquiera puede sugerir. Lucho sabrá si hay nuevo gabinete. Esa es su responsabilidad”, apostilló.

“Las decisiones que tome el presidente deben estar enfocadas en la realidad y en las necesidades del país y la gestión va de la mano de las decisiones que tome Arce”, afirmó el gobernador Luis Fernando Camacho, tras cuestionar la manera en la que Morales ejerce presión en el Gobierno. 

“Ellos marchan a favor de la muerte, son los expositores de la muerte, sinvergüenzas ellos, porque si el barbijo no protege, si no sirve, si no existe el Covid-19, por qué andan con barbijo, marchan con barbijo, de qué se protegen si el virus no mata, no sean sinvergüenzas, marchan a favor de la muerte”, enfatizó la autoridad.

Fuente: EL DEBER