Estados Unidos lleva años fantaseando con un iPhone "made in USA". Ahora va a tener uno hecho en... la India

La guerra comercial desatada por Trump está forzando a Apple a buscar alternativas para sus iPhone, sobre todo para los dedicados a Estados Unidos, con India surgiendo como la tabla de salvación frente a unos aranceles que amenazan con disparar los precios.
La situación actual. Apple ha sufrido su peor caída bursátil en lo que llevamos de siglo, desplomándose un 20% en solo tres días tras el anuncio de los nuevos aranceles de Trump que imponen un 54% a productos chinos frente a solo un 26% a los indios.
La empresa, según The Times of India, está redirigiendo rápidamente iPhone fabricados en India hacia el mercado estadounidense, en una maniobra defensiva para mitigar el impacto económico inmediato mientras busca soluciones a largo plazo.
Por qué es importante. Esta crisis podría acelerar un cambio geopolítico en la fabricación tecnológica global, con India ganando terreno a expensas de China como principal centro de producción electrónica.
El traslado no se limita a evitar aranceles: diversifica riesgos geopolíticos y aprovecha un mercado indio que está en auge.
El gran mito. La fantasía de un "iPhone made in USA" promovida por el secretario de comercio Howard Lutnick es económicamente inviable. Es bastante obvio pero lo detalla bien 404 Media.
- Un iPhone que cuesta 30 dólares ensamblar en China requeriría 300 dólares en Estados Unidos.
- Se necesitaría una reestructuración completa de cadenas de suministro globales establecidas durante décadas.
- Incluso fabricando en su país, Apple seguiría dependiendo de componentes importados sujetos a aranceles.
En cifras. Los aranceles actuales incrementarían el coste de producción de un iPhone 16 Pro de 550 a 850 dólares (300 dólares más), mientras que desde India el aumento sería de "solo" 150 dólares.
Si Trump cumple su amenaza de elevar los aranceles al 104% en total para China, el sobrecoste podría dispararse hasta los 600 dólares por unidad, según Newsweek.
La opción pragmática. India se perfila como la alternativa viable y ya en marcha, con capacidad para fabricar unos 25 millones de iPhone anuales, suficientes para cubrir aproximadamente el 50% de la demanda estadounidense si redirecciona toda esa producción hacia Estados Unidos según estima Bank of America.
Apple no parte de cero en India. Desde 2017 ha trasladado gradualmente parte de su producción allí, comenzando con modelos antiguos y expandiéndose hasta los más recientes, como destaca The Wall Street Journal.
- La opción más pragmática sería conseguir una exención arancelaria como la de 2018, pero Trump se encargó de destruir esa esperanza.
La perspectiva política. India y China mantienen una relación históricamente tensa marcada por disputas territoriales y competencia por la influencia regional, como el enfrentamiento militar en el valle de Galwan en 2020.
Y ahora qué. Tim Cook, presumiblemente, intentará negociar exenciones arancelarias mientras aumenta gradualmente la capacidad productiva en India, pero no deberíamos esperar cambios drásticos e inmediatos. Este es un proceso inherentemente lento.
China seguirá siendo un pilar para Apple. Ahora mismo sigue suponiendo el 80% de su capacidad productiva en general y el 90% de la de los iPhone en particular, frente al 10-15% que supone India.
A medio plazo, podríamos ver una producción aún más diversificada, con Vietnam (que ya fabrica el 90% de los Apple Watch) y otros países del sudeste asiático ganando peso en la cadena de suministro.
FUENTE: XATAKA