Escasez de combustible: transporte evalúa paro y empresarios importar

Temen que YPFB no cumpla la demanda del agro en época de siembra. Gobierno descarta quitar la subvención de carburantes y CAO plantea cuatro condiciones.

Frente a la escasez de carburantes en Bolivia, el transporte analiza un paro y los empresarios piden autorización para importar. Mientras que la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) emitió cuatro condiciones para aceptar que les quiten la subvención.

El ejecutivo de la Federación Andina de Choferes 1 de Mayo, Reynaldo Laura, indicó que su sector pedirá a sus representantes nacionales un ampliado para determinar un paro nacional en protesta por la falta de combustible en el país.

El transporte pesado ya protestó por la irregularidad en el suministro y formalizó el pedido de destitución del presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, y del director de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), ingeniero Germán Jiménez, "por no resolver el problema que se repitió varias veces en el año".

El Transporte aseguró que remitió notas a las autoridades departamentales, pero no tuvieron efecto. "Creo que la medida de presión nomas va a tener que solucionar este tema”, dijo Laura.

La federación sostendrá una reunión e instará a sus representantes nacionales a convocar al resto de la dirigencia del país para sumir acciones.

EMPRESARIOS

El sector empresarial también se refirió al tema. El gerente de la Cámara Nacional de Exportadores de Bolivia (CANEB), Marcelo Olguín, indicó que algunos sectores empresariales, ante la escasez, quieren importar su propio combustible y piden al Gobierno facilitar esa posibilidad.

“Hemos conocido el interés de algunos sectores y algunos gremios empresariales, así lo han manifestado, la posibilidad de solicitar al Gobierno que se pueda flexibilizar y manejar de la manera más rápida y expedita las posibilidades de que algún sector pueda realizar sus importaciones de manera directa. Así como lo hacen algunos operadores privados en el sector minero, particularmente en el sur del país, en Potosí”, dijo Olguín.

Durante los últimos meses, el suministro de diésel registró anormalidades que provocaron desabastecimiento en varias regiones del país. La preocupación por la escasez, especialmente, del diésel se agravó más en el sector productivo agroindustrial, que está por comenzar la temporada de siembra.

La semana pasada, la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) emitió un pronunciamiento pidiendo al Gobierno solucionar el problema del desabastecimiento de diésel; además, advirtió que existe un alto riesgo de que se incrementen los precios de los alimentos.

El gerente de la CANEB insistió en que al autorizar y facilitar la importación de combustible a precio internacional, el Gobierno tendría un alivio de económico.

SUBVENCIÓN

Quitar la subvención de carburantes a ciertos sectores es otro problema que se afronta en Bolivia. El ejecutivo de la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales Originarias de Bolivia (Csciob) “evista”, Juan Enrique Mamani, se sumó a la propuesta para que se anule la subvención a las cooperativas auríferas del país.

La CAO comunicó que aceptará que no les subvencionen combustible, pero planteó cuatro condiciones.

En entrevista con ERBOL, el presidente de la CAO, José Luis Farah, explicó que la primera condición sería ampliar a 10 años el periodo para verificar de la Función Económica Social (FES) de los predios productivos.

La segunda condición es autorizar el uso de la biotecnología, es decir la semilla mejorada para aumentar la productividad.     

Farah ejemplificó que de una misma cantidad de tierra donde se produce tres toneladas de maíz, cono la semilla mejorada se podría sacar ocho toneladas.

La tercera condición es que se liberen las exportaciones, levantándose los cupos en productos como soya y carne. El directivo explicó que así los productores podrían costear el diesel sin subvención y vender al exterior para generar divisas.

La cuarta condición consiste en seguridad jurídica, para dar certeza a los productores de que sus tierras no serán avasalladas.

Farah manifestó que los productores requieren de diesel oportuno, particularmente en tiempos de siembra como el actual. En ese marco, podrían aceptar quitar la subvención para evitar situaciones actuales donde hay escasez y se generan mercados negros del combustible.