Economía Nacional
En los dos meses de convulsión salieron de la banca Bs 5.955 MM
El 22 de octubre, organizaciones ciudadanas convocaron a un paro nacional por tiempo indeterminado. Diecinueve días después, el 10 de noviembre, Morales renunciaba al cargo tras perder el apoyo de los militares y la Policía.
En octubre y noviembre de 2019, en medio de una Bolivia convulsionada tras las elecciones generales y la posterior renuncia de Evo Morales a la presidencia, Bs 5.955 millones (3,3% del total de los ahorros del público) salieron del sistema de intermediación financiera.
Así, en noviembre, durante el mes más álgido de las protestas sociales, el retiro de dinero de las entidades financieras creció un 116% respecto a octubre. Si en el décimo mes del año salieron Bs 1.882 millones, en noviembre la cifra subió hasta los Bs 4.073 millones (más del doble). En total, en dos meses, la fuga de dinero sumó Bs 5.955 millones ($us 855,6 millones).
Por entidades financieras, la salida de depósitos se registró con mayor incidencia en el banco público Unión, seguido de los bancos múltiples, bancos Pyme, cooperativas de ahorro y crédito abiertas y en las entidades financieras de vivienda. La única entidad que no se vio afectada por el retiro de dinero fue el Banco de Desarrollo Productivo (BDP), según la información estadística publicada en el sitio web de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (Asfi).
Un dato llamativo es que la fuga de depósitos solo se dio en moneda nacional. En el periodo de análisis, Bs 7.092 millones ($us 1.019 millones) fueron retirados por el público, sobre todo en depósitos a la vista y caja de ahorros. En octubre salieron Bs 2.169 millones y en noviembre, Bs 4.923 millones.
Mientras los ahorros del público en bolivianos decrecían en ese periodo, los depósitos en moneda extranjera (dólares estadounidenses) aumentaron en Bs 1.137 millones ($us 163,4 millones). En octubre ingresaron Bs 286 millones a las entidades financieras y en noviembre la cifra se triplicó a Bs 851 millones.
En cuestión de un mes los ahorros en dólares crecieron en un punto porcentual y en bolivianos bajaron en la misma proporción. Al 30 de noviembre de la presente gestión, los depósitos están compuestos de la siguiente manera: 86% en moneda nacional y 14% en moneda extranjera.
El 20 de octubre se llevaron a cabo las elecciones generales en el país que dieron como ganador en primera vuelta al entonces presidente Evo Morales. El resultado fue cuestionado por sectores de oposición y cívicos debido a denuncias de un presunto fraude.
Al día siguiente de la contienda electoral, en varias regiones del país estallaron incidentes violentos, que incluyeron incendios, enfrentamientos con la Policía y saqueos. Manifestantes quemaron, por ejemplo, al menos tres tribunales electorales departamentales (TED) en Potosí, Sucre y Cobija.
El 22 de octubre, organizaciones ciudadanas convocaron a un paro nacional por tiempo indeterminado. Diecinueve días después, el 10 de noviembre, Morales renunciaba al cargo tras perder el apoyo de los militares y la Policía. Su renuncia fue precedida de violentos enfrentamientos. En cinco semanas de convulsión social y política en el país, del 20 de octubre al 24 de noviembre, cuando se firmó un acuerdo de pacificación, se registraron 23 muertos y 715 heridos.
El 4 de diciembre, La Razón publicó que en octubre de este año los ahorros del público en el sistema financiero bajaron en 1,04% respecto al mes precedente, de Bs 180.683 millones a Bs 178.801 millones. La Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban) respondió en esa ocasión que “es importante tener en cuenta que la realización de las pasadas elecciones presidenciales en octubre despertaron expectativas y, en muchos casos, inquietudes, haciéndose natural que el público quisiera retirar parte de sus ahorros; por lo tanto, era previsible una disminución”.
El Ministerio de Economía y Finanzas Públicas informó ayer a La Razón que “ya se retomaron las acciones correctivas y se está volviendo a la normalidad, la liquidez del sistema financiero se está recuperando de manera satisfactoria”. “En el caso del Banco Unión sucede lo mismo”, señaló.
Fuente: La Razón