Crisis hídrica en Tarija: La sequía amenaza la producción agrícola y la seguridad alimentaria
A pesar de las recientes lluvias, el departamento de Tarija enfrenta una severa crisis hídrica que está poniendo en jaque la producción agrícola y la seguridad alimentaria local. Eider Quiroga, asambleísta departamental, ha lanzado una alerta sobre el colapso de los sistemas de riego en el Valle Central, afectando a decenas de comunidades que dependen de estos para sus cultivos, en medio de un clima extremadamente caluroso y seco.
Problemas en los Sistemas de Riego
Quiroga detalló la magnitud del problema, citando varios sistemas de riego gravemente afectados. "El problema incluye el sistema de Riego Pampa, Colorado, CENAVIT, Calamuchita, que abarcan 16 comunidades, además de otros como Ancon Grande, Ancon Chico, Chosa, San Isidro, Pampa la Villa Chica, La Ventolera, La Angostura y Toma Tunal". En varios de estos puntos, como el Angosto, La Ventolera o La Angostura, el río Guadalquivir se ha secado completamente, exacerbando la crisis hídrica.
El cambio climático y las temperaturas extremadamente altas han intensificado la necesidad de riego frecuente. Quiroga explicó que algunos cultivos, como la papa, requieren riego cada dos o tres días, mientras que cultivos más resistentes como la viña, aunque toleran más tiempo sin agua, también se ven afectados por la falta de riego constante debido a las condiciones extremas.
Críticas a la Gestión del Agua y Falta de Acción Gubernamental
La crisis hídrica no se limita a Uriondo, sino que afecta a toda la región. Quiroga criticó la inacción de las autoridades locales y nacionales, señalando que "ni los alcaldes, ni la Gobernación, ni el Gobierno Nacional han dado una solución efectiva al problema de la sequía". Las medidas actuales, como la distribución de fertilizantes y pequeñas cantidades de abono, son vistas como paliativos insuficientes frente a la gravedad de la situación.
Gestión del Agua en el Lago San Jacinto
Un factor que agrava la crisis es el uso del agua del embalse de San Jacinto. Según Quiroga, aunque el lago contiene más de 40 hectómetros cúbicos de agua, solo alrededor de 6 hectómetros cúbicos se destinan al riego, mientras que el resto —aproximadamente 34-35 hectómetros cúbicos— se utiliza para la generación de energía eléctrica.
"A partir de las 6 de la tarde, abren las compuertas del lago San Jacinto para generar energía, soltando 18.000 litros por segundo", denunció Quiroga. Sin embargo, los agricultores solo pueden aprovechar alrededor de 2.000 litros por segundo durante breves intervalos, mientras que los restantes 16.000 litros se desperdician río abajo.
Declaratoria de Emergencia y Propuesta de Ley de los Regantes
Ante esta alarmante situación, los regantes y las comunidades afectadas han exigido una declaratoria de emergencia que priorice el uso del agua para el riego, especialmente en el lago San Jacinto. "No podemos permitir este desperdicio de agua", enfatizó Quiroga, subrayando la urgencia de una respuesta inmediata.
En respuesta a la crisis, los regantes han presentado una propuesta de ley para garantizar que el agua de los embalses y afluentes se priorice para el riego, con el objetivo de proteger la producción agrícola y la seguridad alimentaria en la región.
Esta iniciativa legislativa busca equilibrar las necesidades de generación de energía con las demandas urgentes del sector agrícola, fundamental para la economía local y el sustento de miles de familias en el departamento.
Acciones Urgentes Necesarias
Aunque la propuesta de ley es un paso importante hacia una solución a largo plazo, también será crucial que se inviertan en infraestructura hídrica, programas de adaptación al cambio climático y una revisión completa de las políticas de gestión del agua y la energía en Tarija. Solo una acción coordinada entre el gobierno, las autoridades locales y la sociedad civil podrá mitigar los efectos de esta crisis hídrica y garantizar la sostenibilidad de la producción agrícola en la región.
FUENTE: AGENCIAS