Aitana y Lamine lideran la fiesta culé en París y Rodri hace historia ante el chasco blanco

De Madrid a París. Del Santiago Bernabéu al Teatro de Chatelet. El FC Barcelona sigue de celebración tras ser el gran triunfador de la 67ª Gala del Balón de Oro y llevarse tres de los principales premios: Aitana Bonmatí revalidó el trofeo a mejor futbolista mundial con su segunda pelota dorada; Lamine Yamal, el premio a mejor joven y el Barça también consiguió el galardón a equipo femenino del año. El otro gran triunfador de la noche fue Rodrigo Hernández, mejor futbolista del mundo y segundo Balón de Oro de la historia del fútbol masculino español después de que Luis Suárez lograra el reconocimiento en 1960.

El centrocampista del Manchester City y de la selección española, en muletas, emocionado y escoltado por Weah y Drogba, arrebató finalmente el premio a Vinicius, que no se presentó al evento. Rodri fue clave tanto en los títulos de su club (Premier League y Community Shield) así como la Eurocopa con la Roja. Y lo agradeció con un excelente discurso, huyendo de estereotipos, hablando de valores y con una oda al mediocentro español, acordándose de Xavi, Iniesta y Busquets, entre otros, y con palabras para Lamine, a quien le animó a seguir trabajando para ganar el Balón de Oro en el futuro.

Histórico podio azulgrana

Pero su protagonismo quedó eclipsado por la fiesta culé. La hegemonía del Barcelona en el fútbol femenino global volvió a evidenciarse una vez con el cuarto Balón de Oro seguido para el club catalán. Dos de Alexia Putellas y otros dos para Aitana Bonmatí, que ayer repitió como ganadora. La centrocampista de Sant Pere de Ribes, quiso compartirlo con sus compañeras: Caroline Graham Hansen, segunda clasificada, Salma Paralluelo, tercera, completaron el podio azulgrana y es la primera vez en la historia que las tres primeras clasificadas son del mismo equipo. 

Poco antes, habían subido todas al escenario porque el Barça, además, obtuvo el reconocimiento a mejor equipo del año después de ganarlo absolutamente todo el curso pasado: Liga, Copa, Supercopa y Champions League de la mano de Jonathan Giráldez, que no se hizo con el trofeo a mejor técnico. Este fue para Emma Hayes, un premio que desde esta edición, tanto en categoría masculina como femenina, se llamará Johan Cruyff, en homenaje al ex técnico azulgrana, un anunció muy emotivo con su hijo Jordi y Hristo Stoichkov y que tiñó más si cabe el evento de azulgrana.

Laporta y Alexia, como capitana, recogieron el trofeo a mejor equipo, pero se saltaron el protocolo y pidieron la presencia de todas las integrantes allí presentes, también Patri Guijarro y Mariona Caldentey, ahora en el Arsenal, junto al directivo Xavi Puig y al actual entrenador Pere Romeu. Y empezó a sonar el himno del Barça. Otro momento memorable.