Un informe reveló que el régimen de Maduro desvió miles de millones en criptomonedas para evadir sanciones internacionales
Un informe de Transparencia Venezuela reveló que las criptomonedas se han convertido en la nueva herramienta del régimen de Nicolás Maduro para evadir sanciones internacionales, lavar dinero y financiar redes de corrupción vinculadas al chavismo.
Criptomonedas como canal de corrupción y evasión de sanciones
La organización Transparencia Venezuela denunció que el sistema criptográfico nacional, presentado por el Gobierno venezolano como un símbolo de “soberanía digital”, ha sido manipulado para desviar miles de millones de dólares en fondos públicos.
El informe indica que entre 2017 y 2025, el régimen de Nicolás Maduro utilizó el criptoactivo Petro como fachada para realizar ventas ilegales de petróleo y operaciones financieras opacas, burlando las sanciones impuestas por la comunidad internacional.
La “trama PDVSA–Cripto”: desfalco millonario liderado por altos funcionarios
El documento detalla que el esquema fue dirigido por el ex vicepresidente y ex ministro de Petróleo Tareck El Aissami —actualmente detenido— y por el ex superintendente de criptoactivos Joselit Ramírez.
Ambos habrían orquestado un desfalco estimado en 16.950 millones de dólares, utilizando estructuras estatales como la Sunacrip y la Tesorería de Criptoactivos para encubrir las operaciones.
Estas instituciones, creadas por el propio chavismo, permitieron ocultar el origen y destino del dinero, al operar fuera de todo control fiscal o judicial.
Del Petro a las stablecoins: la nueva etapa del lavado digital
Tras el colapso del Petro en 2024, el régimen lanzó una nueva fase basada en stablecoins como USDT y USDC, aprovechando la participación de empresas privadas con licencias oficiales como Kontigo y Crixto Pay.
Estas plataformas manejan millones de dólares en transacciones mensuales sin controles efectivos, permitiendo la conversión de activos ilícitos en divisas aparentemente legales mediante la compraventa a precios paralelos.
Según Transparencia Venezuela, bancos como Bancamiga, Banco Plaza y Banco Activo también estarían implicados, facilitando recargas de hasta 100.000 USDC en efectivo sin verificación de origen, lo que constituye un esquema moderno de lavado de dinero bajo amparo estatal.
Tecnología al servicio del saqueo y la impunidad
El informe denuncia que este modelo reproduce la lógica del viejo sistema de dólares preferenciales, pero ahora respaldado por tecnología blockchain, lo que facilita la triangulación de capitales sin supervisión internacional.
Lejos de promover una transformación digital, el uso de criptomonedas en Venezuela se ha convertido en una herramienta para perpetuar la corrupción y la impunidad, beneficiando a las élites cercanas a Maduro.
Transparencia internacional exige control y sanciones
La ONG llamó a la comunidad internacional a fortalecer los mecanismos de monitoreo financiero y a exigir transparencia real sobre las operaciones criptográficas del Estado venezolano.
“El experimento cripto del chavismo no es innovación, sino la digitalización del saqueo”, concluye el informe, que urge a frenar el uso de monedas digitales como instrumentos de corrupción transnacional.
FUENTE: EJU