Santa Cruz se prepara para una semana con vientos intensos y altas temperaturas
Santa Cruz se prepara para enfrentar condiciones climáticas desafiantes en los próximos días, según el análisis del experto en agrometeorología Luis Alpire. La combinación de vientos intensos del norte y temperaturas elevadas impactará varias regiones del departamento.
Las temperaturas experimentarán fluctuaciones notables en distintas provincias:
Andrés Ibáñez y Norte Integrado: Se espera un rango térmico entre 23 y 35 °C, con vientos del norte, alcanzando ráfagas de más de 60 km/h y cielos parcialmente nublados. En el Norte Integrado se anticipa lluvia, de débil a moderada, mientras que en la provincia Andrés Ibáñez se espera una ausencia de precipitaciones.
Valles cruceños: Las temperaturas fluctuarán entre 13 y 31 °C, con vientos del norte y ráfagas de hasta 50 km/h. Los cielos estarán parcialmente nublados, y se prevé lluvia débil a moderada.
Cordillera: La temperatura variará entre 18 y 39 °C, con vientos del norte y ráfagas superiores a 80 km/h. También se esperan cielos parcialmente nublados y lluvia débil a moderada.
Chiquitania: Índices térmicos entre 24 y 38 °C, acompañados de vientos del norte con ráfagas de hasta 60 km/h. Los cielos se presentarán parcialmente nublados, con posibilidad de lluvia débil a moderada.
Lluvias oportunas impulsan la siembra de verano
El informe del experto indica que las recientes precipitaciones han sido providenciales para el departamento. Estas lluvias, no solo extinguieron el último incendio forestal persistente en Roboré, sino que también aliviaron la prolongada sequía que afectaba a municipios como Cuevo y Boyuibe en la provincia Cordillera.
Con registros de lluvia entre 30 y 60 mm desde el miércoles pasado, se ha reabastecido el agua para el ganado, propiciando el rebrote de las plantas y restaurando la normalidad en la producción ganadera. Este alivio llega especialmente para las alrededor de 800.000 reses en el chaco cruceño que se veían afectadas por la falta de agua.
Las lluvias no solo benefician al sector ganadero, sino que también dan el impulso necesario para dar inicio a la siembra del ciclo agrícola más importante del año. Se proyecta una superficie cultivada de 1.374.000 hectáreas, incluyendo soya, maíz y sorgo. Este año, el 80% de la producción se destinará a la exportación, contribuyendo a la obtención de divisas en medio de una coyuntura de escasez evidente.