Policía Federal recibe al jefe del PCC en un carro blindado y con la frontera de Cáceres resguardada

El ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, junto con el comandante departamental de la Policía de Santa Cruz, Erik Holguín, hicieron la entrega del brasileño Igor Oliveira de Campos, jefe del Primer Comando de la Capital del Estado de Mato Grosso, a la Policía Federal de Brasil esta tarde.

La entrega se hizo en medio de un fuerte operativo coordinado entre Bolivia y Brasil, en el que se movieron más de cien efectivos policiales con la finalidad de evitar que Oliveira, alias 'Irak', sea rescatado por miembros del PCC, pues esta información se manejaba desde que estaba en celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), de la capital cruceña.

Fue en el punto fronterizo que une la comunidad San Juan de Corralito, de San Matías, y en la localidad brasileña de la Corixa, de Cáceres, donde se reunieron las dos fuerzas del orden y concretaron de manera exitosa la expulsión y entrega de Oliveira.

El jefe del PCC fue subido a un carro blindado de la Policía Federal y trasladado hasta el Estado de Mato Grosso, mientras era acompañado por un fuerte contingente policial brasileño que resguardó la frontera de Cáceres toda la tarde de este miércoles.

El delegado de Policía Federal de Brasil, Marlo Oliveira, recibió Igor Oliveira de Campos y señaló que este sujeto era buscado en su país por los delitos de organización criminal, tráfico de armas, tráfico de drogas y homicidio.

Además, señaló que el jefe del PCC tiene condena en Brasil por robo y que salió de la cárcel con arresto domiciliario, pero el año pasado se fugó para Bolivia a conformar una organización criminal, la cual fue desbaratada el fin de semana en la capital cruceña.

Por su parte, el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, anunció que se creará un centro de Multipropósito en la frontera que une San Matías y Cáceres con la finalidad de evitar que extranjeros ingresen al país a cometer hechos delictivos.

Igor de Oliveira es el líder del PCC en el estado brasileño de Mato Grosso, es decir que él controlaba todos negocios ligados al narcotráfico y al tráfico de armas en esa gran ciudad fronteriza con Bolivia. Además, tenía bajo su mando a otros emisarios y sicarios brasileños.

Según las investigaciones de la Felcc, Igor Oliveira era también un reclutador de sicarios para el PCC y encargado de las actividades ilícitas que se desarrollan, entre ellas el tráfico de drogas, en la ciudad brasileña de Cáceres, perteneciente a Mato Grosso, que es frontera con el municipio boliviano de San Matías, donde se registran constantes asesinatos por ajustes de cuentas.