Plan económico se apoya en siete ejes con una visión de largo plazo

El plan económico del Gobierno se estructura en siete ejes estratégicos que buscan sentar las bases del desarrollo del país entre 2026 y 2035, con una visión integral que articula al Estado, las regiones y los sectores productivos para impulsar el crecimiento sostenible.

El Gobierno presentó los lineamientos del nuevo Plan General de Desarrollo Económico y Social (Pgdes) durante un encuentro nacional con exportadores realizado en Cochabamba, con la presencia del presidente Paz y autoridades del área económica. La estrategia será concluida en febrero de 2026, antes de las elecciones subnacionales.

Una economía pensada para la gente y el empleo formal

El primer eje, denominado Economía para la gente, apunta a generar empleo, reducir la informalidad y abrir oportunidades para emprendedores e innovadores. El ministro de Planificación, Fernando Romero, destacó que el 85% de la economía es informal, por lo que el desafío central es facilitar la formalización de empresas para que accedan a financiamiento y mercados de exportación. Este eje incluye reformas en hidrocarburos, minería y biocombustibles, además de abrir un debate estructural sobre la tenencia de la tierra en el sector agropecuario.

Bolivia al mundo y la expansión de mercados internacionales

El segundo eje, Bolivia al mundo, busca fortalecer la presencia comercial del país en mercados internacionales mediante reglas claras y continuidad en las exportaciones. El Gobierno plantea priorizar la integración regional, mejorar las vías de salida al Atlántico y al Pacífico y aplicar una política de cielos abiertos para potenciar el turismo y la conectividad aérea.

Autonomías y equilibrio territorial con Bolivia 50-50

El tercer eje, Bolivia 50-50, propone profundizar las autonomías y redefinir la relación entre el Estado central y las regiones. Además de la redistribución de recursos fiscales, se plantea fortalecer competencias en educación, salud y desarrollo territorial para que los gobiernos subnacionales impulsen su propio modelo de crecimiento económico.

Un Estado moderno, eficiente y sin trabas burocráticas

Bolivia moderna y eficiente es el cuarto eje y responde a una de las principales críticas a la gestión pública: el denominado “Estado tranca”. La propuesta contempla la desburocratización de trámites, digitalización de servicios, simplificación para la apertura y cierre de empresas, y el fortalecimiento de la seguridad jurídica y el respeto a la propiedad privada como condiciones clave para atraer inversión.

Transparencia y reforma profunda del sistema judicial

El quinto eje plantea una Bolivia transparente, con énfasis en la lucha contra la corrupción y la reforma integral de la justicia. El ministro Romero señaló que la corrupción afecta tanto trámites cotidianos como redes vinculadas al contrabando, narcotráfico y organizaciones criminales, por lo que se requieren cambios estructurales.

Bienestar social como pilar del desarrollo económico

El sexto eje, Bienestar para todos, propone fortalecer la salud, la educación, las políticas de vivienda y el saneamiento básico, además de promover la inclusión social y de género como componentes fundamentales del desarrollo sostenible.

Sostenibilidad ambiental y transición energética

El séptimo eje, Bolivia Verde y Sustentable, incorpora una agenda ambiental que busca equilibrar producción y conservación. Incluye la protección de áreas protegidas, la gestión sostenible de recursos naturales, el acceso a financiamiento climático, la administración de recursos hídricos, la transición energética y la prevención de la contaminación ambiental.

El Gobierno aseguró que la elaboración del Pgdes será un proceso participativo, coordinado con municipios, gobernaciones y sectores estratégicos, con el objetivo de consolidar una visión económica compartida para el país a partir de 2026.

FUENTE: El Deber