La alerta naranja en el río Pilcomayo se amplía a marzo

El riesgo de desbordes continúa latente. Desde hace tres años el comportamiento pluvial es variado; un año las lluvias se presentaron después de la segunda semana de enero, luego en febrero a principios, luego a mediados y ahora ya casi en marzo

A causa de que las precipitaciones pluviales continuarán las próximas semanas, la alerta naranja declarada por el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) por las posibles crecidas en la cuenca baja del río Pilcomayo se mantiene hasta al menos la primera quincena de marzo, sostuvo el secretario de Gestión Territorial y Ambiental del Gobierno Municipal de Villa Montes, Reiber Cari.

“Creemos que aún habrá lluvias – argumentó-, quizá no con la misma magnitud como las que hubo, pero persistirán todavía. Continúa la emergencia en la cuenca baja del Pilcomayo, por lo menos hasta que pase la primera quincena de marzo, el municipio de Villa Montes sigue en alerta porque el riesgo no ha pasado, con el clima no se puede saber, es impredecible”.

Observaciones

Recordó que este tipo de observaciones las realizan junto al Centro de Operaciones de Emergencia (COE), desde hace tres años vieron que el comportamiento pluvial es variado, un año las lluvias se presentaron después de la segunda semana de enero, al siguiente las primeras semanas de febrero, posteriormente la segunda mitad de febrero y ahora “se ha movido hasta finales de febrero”.

“Nosotros creemos que a veces el clima se desplaza y lo que no llueve en varios meses puede hacerlo en un día; por ejemplo, el 10 de febrero la precipitación duró cuatro horas y cayó una cantidad de agua que suele hacerlo durante tres meses”, contó a tiempo de pedir a los comunarios estar atentos ante cualquier subida de caudal del Pilcomayo.

Apuntó que es mejor prevenir antes que tener problemas en el municipio de Villa Montes, si bien este año se presentaron menos temporales que otros años, “hasta que no termine la primera quincena de marzo no se puede bajar los brazos”.

Informó que al momento los niveles del rio Pilcomayo se encuentran por debajo del límite de riesgo, la alerta naranja que emitió el Senamhi para el 26 y 29 de febrero fue porque a causa de los aguaceros que se dieron en otros municipios se preveía que afectaría en la crecida del río, sin embargo ahora bajó a menos de los tres metros.

El 22 de febrero el nivel llegó a 4,30 metros y eso provocó inundaciones en las comunidades de la llanura chaqueña pero que no generaron daños, aunque se tardó mucho en evacuar el agua. Ese día se presentaron problemas en el distrito 5, pero sin mayores riesgos. “Cuando el nivel del rio en Villa Montes supera los tres metros de altura, entonces se debe estar alerta”, agregó.

El 26 de febrero se preveía que las comunidades de Puesto Uno, Cutaiquí, La Victoria y Esmeralda en el municipio de Villa Montes eran las que más riesgo tenían de inundarse a causa de la crecida del río Pilcomayo por lo que el gobierno edil había tomado sus previsiones y realizó el monitoreo de toda cuenca alta de este afluente.

Municipios tomaron medidas preventivas

El pasado fin de semana, el director de Gestión de Riesgos y Cambio Climático, Ember Montellanos, había informado que el Gobierno Departamental de Tarija, en coordinación con los municipios de Yacuiba y Villa Montes, empezaron a tomar medidas para evitar que la crecida del río Pilcomayo afecte a las comunidades que se encuentran en los alrededores de su cuenca baja, como son D’orbigny, Mora Nueva y Mora Vieja.

En ese momento sostuvo que a causa de las posibles inundaciones empezaron a realizar un monitoreo escalonado de la cuenca alta del rio San Juan del Oro y del Pilcomayo y ya no basándose en las alertas y probabilidades meteorológicas, sino en mediciones reales que tienen los municipios.

“De manera escalonada iremos observando los niveles del Pilcomayo para ver si es que hay una emergencia y un alerta por el desborde los ríos, ya se realizan los trabajos de prevención en Villa Montes y esperamos que este año no haya el rebalse, hay que estar atentos, el sistema de  alerta debe estar coordinado con las comunidades de las zonas bajas del Pilcomayo”, había sostenido en esa oportunidad.

El martes, el responsable de la Secretaría de Medio Ambiente de la Gobernación de Tarija, Pablo Avilés, informó que la cuenca del río Pilcomayo se encontraba dentro de los límites de seguridad, aunque había la probabilidad de un rebalse de su caudal, pero que gracias a los trabajos de prevención que se realizaron se pudo controlarlo y de esta manera evitar que se inunden las comunidades desde Sausal hasta D’orbigny.

“No hubo desbordes porque se realizó un trabajo de prevención conjunto, lo que ayudó bastante porque se hizo un convenio con el Gobierno Municipal de Yacuiba, mediante el cual el Gobierno Departamental puso los equipos, mientras que esa Alcaldía dotó del combustible necesario”, sostuvo en esa oportunidad.

Fuente: El País