Chapare: en 2008 ya alertaban sobre el virus mortal de Bolivia
El virus chapare del que días atrás se informó una posible transmisión entre humanos en Bolivia, ya había encendido una alarma en 2008, cuando en una revista científica publicó un artículo en el que se lo describía relacionado a la muerte de un joven de 22 años ocurrida en 2003.
Según reconstruyó en su momento la publicación especializada en Ciencia EurekAlert, un equipo de autoridades de salud bolivianas, expertos en salud de la Marina de los EE.UU. con sede en Lima, Perú, y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, tal su sigla en inglés) habían logrado describir el "chapare", un arenavirus no reconocido previamente y que había sido descubierto en muestras de suero de un paciente en una zona rural de Bolivia que finalmente murió de la infección.
Ese estudio sobre el chapare se publicó el 18 de abril de 2008 en la revista científica Plos Pathogens.
El virus Chapare
Al principio, los médicos pensaron que el paciente tenía dengue o fiebre amarilla, enfermedades causadas por dos virus no relacionados que pueden provocar hemorragias. "Él estuvo unos cuantos días con un tipo de enfermedad parecida al resfrío, con dolores de cabeza y musculares, se deterioró rápidamente (...) para terminar en colapso y hemorragia", relató entonces Stuart Nichol, de los CDC, quien ayudó con la investigación.
"Posiblemente no estamos al tanto de muchas infecciones de este tipo que se registran en esas comunidades", agregó Nichol.
El investigador explicó en 2008 a Yahoo! News que no había sido fácil averiguar más sobre el virus. Un equipo fue a la zona donde la persona se enfermó y tomó muestras de varios roedores, pero no pudo encontrar a ninguno que estuviera infectado.
El nombre del nuevo virus se debe al río Chapare, ubicado a los pies de la cordillera de Los Andes.
Un cable de la agencia AP fechado en Madrid y publicado por el diario español El Mundo el 29 de abril de 2008 señala que el Ministerio de Salud boliviano, en colaboración con investigadores estadounidenses, trataba de localizar a "un tipo de roedor capaz de transmitir un nuevo virus detectado en Bolivia y que puede provocar la muerte en humanos".
El entonces director de Epidemiología de Bolivia, René Barrientos, declaró que se trataba de "una cepa nueva del género de los arenavirus", bautizada por los científicos como "chapare arenavirus" por su localización en una vasta región selvática del centro de Bolivia, llamada Chapare. "Allí se encuentran los mayores cultivos de coca bolivianos y la zona sufre endémicamente otras enfermedades también transmitidas por roedores, como el hantavirus", contaba Barrientos.
Investigaciones sobre el virus
Las investigaciones habían comenzado en 2003 tras el fallecimiento de un joven de 22 años, en cuyo cadáver finalmente se detectó la presencia de este virus. "Es posible que haya habido más muertes, por lo que estamos enviando a los laboratorios otras muestras recogidas en la zona", explicó Barrientos. Concretamente se investigaban entonces las causas del fallecimiento de otras dos personas en la misma región con idénticos síntomas de los del joven fallecido.
Las pruebas iniciales al primer fallecido descartaron que padeciese dengue o fiebre amarilla, por lo que su médico local decidió enviar muestras a los laboratorios de alta seguridad de los CDC. Allí los investigadores descubrieron que se estaban enfrentando a un patógeno desconocido hasta el momento, ya que las pruebas dieron negativas para los más variados y rarísimos virus conocidos hasta entonces.
"Hay un montón de tipos de arenavirus que no conocemos, ¿significa eso que vayan a causar una epidemia peligrosa para todo el planeta?", se preguntó hace doce años uno de los expertos de los CDC, Pierre Rollin. "No lo creo, pero sí es posible que representen un problema local", contestó.