Censo: El INE ahora dice que “desde 1900 se ha pedido nombres y apellidos” en la boleta censal

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A horas del censo ha surgido una polémica sobre la inscripción del nombre completo en la boleta. El jefe nacional de Temática del INE, Iván Márquez, indicó que desde 1900, en todos los censos que se ejecutaron en Bolivia, siempre se pidió el nombre y los apellidos de los encuestados.

“Si revisamos los Censos desde 1900, se ha pedido nombres y apellidos (...) y se ha mantenido el secreto estadístico y la confidencialidad. Como cualquier oficina de estadística, esto lo hacemos cumplir”, afirmó el funcionario.

En su criterio, se generó un “revuelo innecesario” sobre este tema.

Sin embargo, horas antes, la coordinadora nacional del Censo, Martha Oviedo, afirmó que se preguntará “el nombre, pero no es por una situación de tener el nombre completo”.

Así abrió la posibilidad de que solo se registre el nombre de la persona que es censada.

La funcionaria explicó que el nombre servirá para tener una relación sobre cómo está compuesto el hogar.

¿Es referencial?, le preguntó la prensa y Oviedo respondió: “El nombre sí, usted me puede dar solamente su nombre”.

Explicó que en caso de que un padre y su hijo tengan el mismo nombre, se especificará en la boleta censal la relación que existe entre ambas personas.

“Tendríamos que decir Pedro, el papá; y el otro (Pedro) es el hijo”, señaló Oviedo.

No es obligatorio

Por su parte, Juan Sabino Quisbert, responsable del INE en Santa Cruz, dijo que esta pregunta en concreto, sobre brindar el nombre completo, sí está normada, pero el ciudadano “no está obligado” a brindarlo al agente censal.

Sobre dar el número de cédula de identidad, remarcó que este dato no está contemplado en la boleta censal.

Otra versión

Tras esta declaración, que se registró en una conferencia de prensa que brindaron varias autoridades en el Ministerio de Salud, Márquez brindó otra rueda de prensa en la que afirmó que el hecho de registrar nombres y apellidos es una práctica recurrente en países de la región y citó a Argentina, Brasil, Chile, República Dominicana y Venezuela, entre otros.

Boleta

Márquez detalló que la boleta consta de 20 páginas, de las cuales tres están referidas al tema de vivienda y 16 páginas para registrar los datos de hasta ocho personas; está dividido en siete capítulos e incluye instrucciones generales para el Censista Voluntario.

“En las preguntas, hay flujos para que la entrevista sea más corta y que luego de una respuesta se pase a otra pregunta; también, hay cuadros de instrucción, que se añaden como ayuda al censista para que haga el registro o algunas recomendaciones”, explicó.

La entrevista durará entre 35 a 40 minutos por familia, y al menos ocho minutos por persona, luego, el censista guardará el cuestionario en la bolsa censal, que al final de la jornada será devuelta a su supervisor.