Bolívar es amo y señor del fútbol boliviano

Bolívar es el ‘amo y señor’ de la temporada 2024. En la final del año ante San Antonio de Bulo Bulo, le ganó por 2-0 con golazos de Ramiro Vaca y Fabio Gomes y con ello dio la vuelta olímpica en el estadio Félix Capriles de Cochabamba. La superioridad celeste fue evidente, es más, pudo haber aumentado el marcador, pero no acertó, ante un rival a disposición.

Es que luego de la expulsión del zaguero Leonardo Justiniano, el equipo valluno minó sus fuerzas y prácticamente le dejó el manejo del partido a su rival, que lo aprovechó para encarrilar una victoria que no solo le dio el título, sino $us 1 millón de premio por parte de Conmebol. Para destacar en los celestes paceños la labor que cumplió ‘Tonino’ Melgar.

En San Antonio sobresalió el meta José Peñarrieta y por momentos Viveros, pero la labor de ambos no bastó. No apareció Daniel Passira y sin Trindade en cancha, que se fue por lesión, la creación de juego desapareció. Esto lo aprovechó bien Bolívar, que administró la pelota y que en el complemento optó por cuidar el resultado para la final festejar.

La primera etapa fue accidentada, con el árbitro Jordy Alemán en medio de reclamos y con un balón estático por muchos minutos producto de las faltas cobradas. Pese a ello, fue Bolívar el equipo que propuso más, el que encerró a su rival y que no lo dejó salir hasta marcarle el 1-0. El golazo de Ramiro Vaca (45’) con remate perfecto, marcó la diferencia hasta ahí.

Eso sí, pudo San Antonio madrugarlo antes del minuto de juego con el cabezazo de Daniel Passira o con el mal remate de Mendoza que se apuró cuando Castellón llegaba en mejor posición. En realidad, fueron sustos, porque Bolívar después, hizo suyo el control del juego. Renzo Orihuela (12’) generó la más clara y luego Vaca también exigió a Peñarrieta.

Pero el partido no tenía continuidad y las faltas, sobre todo, se daban en el campo de San Antonio. Alemán se equivocó entregándole un tiro libre a Bolívar por una mano de Trindade que no existió y luego expulsó a Leonardo Justiniano por una falta contra Fabio Gomes cuando encaraba. Consideró que era último hombre -no lo era- y le mostró la roja directa.

Pese al reclamo cochabambino el juez no dio marcha atrás y la situación comenzó a ponerse aún más difícil para San Antonio. Ese golpe sicológico lo aprovechó bien Bolívar que logró marcar el 1-0 con un zapatazo de Ramiro Vaca tras combinación con Leonel Justiniano. Al minuto (46’) Gomes pudo haber puesto el segundo, pero falló ante Peñarrieta.

El segundo tiempo fue más frenético y comenzó con el tiro al palo de Adriel Fernández (49’). Fue lo más peligroso de San Antonio ya que después generó poco. A los 50’ vino la respuesta celeste a través de Melgar que remató afuera, un pase retrasado de Gomes que se había internado por derecha tras una corrida que dejó atrás a los zagueros.

La supremacía celeste continuó porque ‘Tonino’ volvió avisar con remate de derecha y Gomes exigió a Peñarrieta tras una contra perfecta iniciada desde el arco por Rubén Cordano. El riesgo continuó porque a los 59’ ‘Pato’ Rodríguez por poco y marcó con un remate potente, que la mano de Peñarrieta y el horizontal evitaran la segunda caída de San Antonio.

Y como la supremacía de Bolívar era evidente el 2-0 llegó a los 87’ a través de Fabio Gomes, el brasileño que también fue verdugo de Oriente Petrolero cuando la academia se coronó campeón del Clausura (1-4). La definición ante Peñarrieta tras pase de Savio, fue de mucha calidad y en medio de los gritos de sus hinchas, festejó un tanto inobjetable.

El tramo final del partido tuvo polémica por el penal que cobró Jordy Alemán por una supuesta falta de Orihuela contra Olguín, sin embargo, el VAR avisó que había posición ilícita. Al final, el 2-0 no se movió y le permitió a Bolívar festejar una nueva conquista, su estrella número 31 de la historia que le permite ratificar que es el más ganador del país.

FUENTE: EL DEBER