Avicultores piden liberar importación de maíz para bajar costos

El sector avicultor de Santa Cruz se declaró ayer en estado de emergencia ante las millonarias pérdidas que reportan los productores debido a los elevados costos de producción, por lo que exigen al Gobierno autorizar la libre importación de maíz.

En medio de una protesta en el centro de la ciudad de Santa Cruz, el presidente de la Federación Nacional de Avicultores, Winston Ortiz, dijo que este sector dio un plazo de 48 horas al Gobierno para atender sus demandas, pues caso contrario se procederá al bloqueo de carreteras.

“Se está trabajando a pérdida. Pedimos al Gobierno que abra las fronteras por seis meses, para que pueda ingresar el maíz, que es el principal alimento para la crianza de pollos”, indicó el dirigente.

También mencionó que existe una sobreoferta de pollo a nivel nacional, puesto que el país demanda al menos 17 millones de pollos por mes, pero produce entre 22 y 23 millones. Por ello, sugirió avanzar en plan de planificación de la producción de este alimento.

En pasados días, el presidente de la Asociación de Avicultores de Santa Cruz (ADA), Omar Castro, alertó un déficit de aproximadamente 40 mil toneladas de maíz al mes, por lo que pidió al Gobierno la liberación de la importación de este insumo.

Mauricio Serrate, presidente de la Federación Departamental de Productores de Leche (Fedeple), aseguró que la demanda de maíz del sector pecuario cruceño bordea las 350 mil toneladas al año. “Se debe importar maíz de países vecinos para aminorar costos”, dijo

Contrariamente a las demandas del sector productivo, en pasadas semanas el Gobierno aprobó el Decreto Supremo 4680, que establece la emisión de certificados de abastecimiento interno y precio justo con la finalidad de garantizar el abastecimiento interno de productos estratégicos como maíz, sorgo y azúcar a precio justo.

La medida fue rechazada por diferentes sectores productivos, sobre todo por el cañero, que dice estar perjudicado por las restricciones a la exportación de azúcar.

Fuente: Los Tiempos