Apenas Bs 204 para atender a cada víctima de violencia

Según datos de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV) se recibe 245 denuncias por mes, que en promedio que suman 2.940 al año. Durante la gestión 2019 ocurrieron ocho feminicidios en Tarija

Sin contar con los presupuestos que manejan las demás instancias, el Gobierno Departamental de Tarija destina unos 204 bolivianos por cada víctima violencia de género que se registra. El presupuesto que se destina en el Plan Operativo Anual (POA) para la Ley de Alerta es de 600.000 bolivianos y según datos de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV) se recibe 245 denuncias por mes, que en promedio que suman 2.940.

Sin embargo, se debe tomar en cuenta que no todas las denuncias llegan a su etapa final y según la Fiscalía Departamental el 60 por ciento de víctimas de violencia de género no emiten una denuncia formal.

Por otro lado, los datos oficiales aportados por la directora de Género, Generacional de la Gobernación de Tarija, Patricia Lima, en la gestión 2018 se presentaron 2.924 denuncias de violencia de género, de las cuales 1.923 están cerradas, 363 en juicio, 45 en etapa preliminar y 593 en preparatoria. En la gestión 2019 se presentaron un total de 2.668 casos de los cuales 1.119 están cerrados, 97 en juicio, 770 en preliminar y 682 en fase preparatoria.

Los 600.000 bolivianos se asignaron a partir de la Ley Departamental 368, promulgada el 24 de diciembre de 2018, con el objetivo de emitir una Declaratoria de Alerta por la Violencia Contra las Mujeres en razón de Género en el departamento de Tarija. En la presente gestión se levantó la alerta por una disminución entre el 2018 y 2019; sin embargo, continúa la preocupación por parte de los colectivos de mujeres activistas que luchan contra la violencia.

Lima indicó que el presupuesto no es el suficiente porque hay un problema estructural desde la designación nacional y no de la Gobernación. Además se debe tomar en cuenta que cada institución tiene una responsabilidad diferente y la dirección del Órgano Ejecutivo tiene el objetivo del cumplimiento de la Ley de Alerta.

La activista, Carla Lizón, reiteró en numerosas ocasiones que la Ley Departamental de Alerta por la Violencia en contra de las Mujeres en Razón de Género, no se cumple y no se realizaron cambios significativos en el departamento. Según análisis de los colectivos de mujeres y de defensa de los derechos humanos, esta ley no ha sido acatada por las instituciones en Tarija, empezando por la misma Gobernación.

La burocratización del Estado en destinar recursos a este sector es uno de los elementos más importantes para que no funcione la normativa. Por otro lado, la vocera del Colectivo Ni Una Menos en Tarija, Alba van der Valk, argumentó que si bien existe mayor información en la población sobre los derechos de las mujeres y las sanciones contra los agresores no hay suficiente personal en las instituciones receptoras, y el que existe aún no está capacitado para continuar con el protocolo que presenta la normativa nacional.

Casa de Acogida, Cepat y Observatorio en funcionamiento

Son tres los proyectos base en los que trabaja la Gobernación; la Casa de Acogida, el Centro Especializado de Prevención y Atención Terapéutica (Cepat) y el Observatorio de la Mujer. En la Casa de Acogida a mujeres víctimas de violencia se atendieron a 135 mujeres y 154 hijos menores y adolescentes.

Respecto a los delitos contra la libertad sexual a niños, niñas y adolescentes se presentaron 221 en el Cepat. Por otra parte, se creó el Observatorio de la Mujer que entre otras funciones, cuenta con un banco de datos de las Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) y la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV), el Ministerio Público y otras instancias, sobre los hechos de violencia o aspectos referidos a este tema en los diferentes municipios del departamento.

La dirección electrónica del Observatorio es http://www.remdiz.org/observatorio/ y cuenta con datos oficiales de todas las instancias mencionadas con el objetivo de rastrear las estadísticas y determinar los focos en los que se debe trabajar con mayor intensidad para prevenir casos de violencia de género. Sin embargo, aún se deben realizar trabajos de actualización.

Fuente: El País