Al menos 150.000 personas disfrutaron la verbena paceña

El evento en el Parque Urbano Central (PUC) fue calificado como un éxito por la Alcaldía.

Música por más de 12 horas, juegos artificiales y danza, La Paz vivió la noche de este viernes una verbena calificada como exitosa por la Alcaldía, organizadora del evento. Al menos 150.000 personas disfrutaron de la cartelera organizada, aseguró el alcalde Iván Arias.

“Nunca habíamos cantado en un escenario como este y ante tanta cantidad de público. Anoche hemos contabilizado, entre las dos, tres bandejas, más o menos 100.000 personas. Afuera, en toda la avenida, otras 50.000, unas 150.000 personas. Yo creo que es un éxito”, expresó el Alcalde.

El evento se realizó en el Parque Urbano Central (PUC); el escenario se instaló en uno de los playones; los espectadores colmaron el sector y llegaron a sobrepasar hacia la vía. En alrededores se apostaron las vendedoras de sucumbés y otras bebidas tradicionales; además no faltaron los anticuchos.

A las 13.00 se dio por inaugurada la verbena y, de a poco, el PUC se fue colmando de personas. Para las 20.00, el lugar estaba por completo lleno y la música retumbaba en todo el centro de la ciudad de La Paz.

“Creo que el comportamiento de la ciudad ha dado respuesta y ha sido positivo”, señaló la autoridad.

La música se extendió hasta pasada la medianoche. Cuando el reloj marcó las 00.00, se hizo una pausa para entonar el Himno a La Paz, mientras juegos pirotécnicos iluminaron el cielo paceño. Pese al frío, el espectáculo siguió y las personas no se movieron hasta la última canción.

El PUC estaba repleto. Este escenario no es habitual para la verbena, que suele ser en la plaza San Francisco. No obstante, debido al riesgo por la dañada bóveda del río Choqueyapu, se cambió hacia el parque urbano; para la siguiente gestión se evaluará repetir este sitio.

“Es muy temprano todavía verlo, vamos a hacer una evaluación porque realmente la cantidad de gente y el lugar se da, pero todavía lo evaluaremos. No quiero tomar determinación sin una evaluación general que hagamos de los compañeros”.

FUENTE: LA RAZON