Un primer estudio señala la influencia del cambio climático en los incendios de Los Ángeles

Uno de los incendios que están devastando Los Ángeles visto desde Palisades Drive. Foto: Ariam23

Desde hace una semana, la ciudad de Los Ángeles y su área metropolitana sufren unos devastadores incendios forestales alimentados por la interacción de diferentes condiciones meteorológicas e hidrológicas (baja humedad, altas temperaturas y fuertes vientos). Y como ocurre con gran parte de los eventos extremos de los últimos años, el cambio climático ha contribuido a que la catástrofe sea mucho más severa.

El proyecto ClimaMeter, financiado por la Unión Europea y el Centro Nacional de Investigación Científica de Francia (CNRS), ha elaborado un rápido estudio para analizar la influencia del cambio climático en los incendios de la ciudad estadounidense. El análisis, firmado por los investigadores Greta Cazzaniga y Davide Farand, señala con una confianza media-alta que las condiciones meteorológicas, muy poco frecuentes, pueden atribuirse al cambio climático provocado por el ser humano.

Según ambos especialistas, las condiciones meteorológicas, similares a las que han desencadenado los incendios forestales de Los Ángeles, son ahora hasta 5 °C más cálidas, un 15% más secas y hasta un 20% más ventosas en comparación con el pasado. Para llegar a esta conclusión, se compararon sistemas de bajas presiones similares durante finales del siglo XX (1950-1986) con los de las últimas décadas (1987-2023), un periodo en el que los efectos del cambio climático se han hecho más evidentes.

El análisis también tuvo en cuenta la variabilidad climática natural, incluida la Oscilación Multidecenal del Atlántico (AMO), la Oscilación Decenal del Pacífico (PDO) y la Oscilación Meridional de El Niño (ENOS), y apunta que solo ha podido influir parcialmente en el suceso.

Al momento de escribir estas líneas, 24 personas han perdido la vida a causa de las llamas. De estos, 16 han sido víctimas del incendio de Eaton (en la zona de Altadena, en Los Ángeles) y ocho del de Palisades (en las montañas de Santa Mónica). Lo más seguro es que la cifra siga creciendo ya que hay varias personas desaparecidas. 

En cuanto a la superficie afectada, se estima que se han quemado más de 16.000 hectáreas, a lo que hay que sumar miles de infraestructuras. Además, desde el pasado martes 7 de enero han sido evacuadas más de 150.000 personas.

“Los incendios forestales de Los Ángeles han demostrado cómo múltiples extremos, exacerbados por el cambio climático, pueden interactuar juntos para desencadenar un desastre sin precedentes”, señala la investigadora posdoctoral y coautora del estudio Greta Cazzaniga. 

“Muchas personas se han visto afectadas, incluidas estrellas de Hollywood, lo que demuestra que el cambio climático no perdona a nadie. Esta catástrofe nos recuerda con crudeza que debemos exigir colectivamente una actuación inmediata para mitigar estos riesgos crecientes y salvaguardar nuestro futuro común», recuerda Davide Faranda, director de Investigación en Climatología del CNRS y también autor del análisis. 

Si bien los incendios forman parte de los ecosistemas naturales, la frecuencia e intensidad de estos se ha visto alterada por el cambio climático. Como ha corroborado el IPCC en sus informes más recientes, el cambio climático impulsado por la quema de combustibles fósiles y la deforestación ha aumentado significativamente en diversas regiones las superficies quemadas por incendios forestales y ha alargado las estaciones climáticas de los incendios. 

FUENTE: CLIMATICA