Un argentino llegó a París, les tocó el timbre a los Messi y lo atendió Antonela Roccuzzo: “Es muy humilde”

Matías Agustín Rojas es un joven de Santiago del Estero que viajó a París para participar de un Mundial de Peluqueros y, de paso, cumplir una misión personal: entregarle un obsequio a la familia del crack rosarino. Consiguió una bicicleta y lo logró.

El santiagueño Matías Agustín Rojas ya tiene la gran anécdota de su vida. Podrá experimentar otros acontecimientos extraordinarios, pero probablemente ningno que se iguale a ser recibido por Antonela Roccuzzo en la mansión de la familia Messi en París, entregarle un obsequio personalizado y registrar el momento para siempre con una foto que ya da la vuelta la mundo.

Una propuesta loca, un luthier y un viaje inolvidable

Todo comenzó cuando a Matías Rojas, nacido en la localidad de Loreto (Santiago del Estero), se le presentó la oportunidad de viajar a Francia para participar de Mundial de Peluqueros, tal su profesión. El destino de la competencia sería París y en la capital francesa viven los Messi: tal vez, pensó, nunca estaría tan cerca de su ídolo, por lo que se decidió a llegar hasta él o a alguien de su entorno y darle un obsequio de su parte y de toda su provincia.

Allí fue Matías acudió al luthier Luis Quiroga, junto a quien pergeñó la idea de fabricar un bombo personalizado para Lionel. El hombre aceptó el desafío y el resultado final fue un impresionante instrumento argentino que en su cuerpo tiene grabada una gigantografía del delantero con la camiseta de la Selección argentina.

Rumbo a París, el Mundial de Peluqueros y una bicicleta para llegar a la casa de los Messi

El pasado 9 de septiembre, Matías escribió un mensaje que decía: “Gracias Dios, llegó el día”, al que acompañó con fotos de su espera en el aeropuerto y, de fono, el avión de Air France al que minutos después se subió para viajar a París. Al otro día, el 10, contó en otro posteo: “Llego la hora. Mañana a las 6 am, hora de la Argentina, vamos a estar compitiendo. La mejor de la suerte para nosotros”, escribió en el marco de la participación en el Mundial de Peluqueros en el que no solo compitió con su equipo sino que terminaron quintos en la tabla general.

Ahora tocaba la segunda parte del plan y para eso necesitaba una bicicleta. Es que Matías se ocupó de averiguar dónde vivían los Messi en París y desde donde él estaba hasta allí había 10 kilómetros de diferencia. Consiguió el medio de transporte, subió el bombo, en una mochila guardó la bandera de Santiago del Estero, su provincia, y emprendió el viaje.

El plan no podía estar saliendo mejor pero lo mejor, en realidad, estaba por ocurrir. Matías llegó hasta la casa de los Messi y fue la propia Antonela Roccuzzo la que no solo lo atendió sino que se acercó a él y tomó el bombo que el peluquero santiagueño le entregó en mano en medio del shock porque eso que tanto había deseado ya era realidad.

“Un poco más de 10 km en 🚲 bici por Francia para llegar a la familia Messi y entregárselo. Gracias Antonella por tu humildad y recibirme. Gracias al gran artista Luis Quiroga por su trabajo en el bombo🎨🧑‍🎨”, escribió Matías Agustín Rojas en su cuenta de Facebook donde tiene cientos de comentarios e interacciones de parte de mucha de la gente que lo conoce, sobre todo de Loreto, donde nació, pero también de decenas y decenas de desconocidos que le transmiten su orugullo por lo que hizo.

La publicación de Matías Rojas sobre su encuentro con Antonela Roccuzzo en París (Facebook).

El mensaje de Matías Rojas tras participar en el Mundial de Peluqueros

Quería agradecer a todos los que hicieron posible este sueño, espero no olvidarme de nadie. Agradecer a mi familia por apoyarme siempre, a mis clientes, a la escuela de Unión de Peinadores por integrarme al Equipo argentino, a las marcas que me ayudaron en el viaje en todo momento, a todos los sponsor, y a cada una de las personas que me ayudaron y me depositaron dinero en mi cuenta: esto es de ustedes.

A mis clientes de la ciudad de Salto, a mis clientes y amigos de la ciudad de Loreto y a todo el pueblo santiagueño, a mi pueblo de Salavina que me dieron una mano siempre, a mis compañeros de Equipo y a nuestro entrenador y para mi colega y gran amigo que me acompañó y q estuvo en todo momento aquí en París al lado nuestro para lo que necesitaba.

A Todos los maestros que tuve y a todos los colegas de argentina, esto es de ustedes también.

La peluquería no es una profesión cualquiera y ojalá algún día tengamos el apoyo del gobirno y que puedan cumplir el sueño muchos profesionales de poder llegar a lo más alto de esta hermosa profesión. Yo lo logré y todavía no lo puedo creer! Me tiemblan las manos al escribir este texto.