Tarija, cuna del gas, enfrenta largas filas por combustible: transportistas denuncian crisis que golpea la economía regional

La crisis del suministro de combustibles golpea con fuerza al departamento de Tarija, históricamente considerado el corazón gasífero de Bolivia. El ejecutivo de la Federación de Autotransporte “15 de Abril”, Gabriel Pérez, alertó sobre el crecimiento inusual de filas en las estaciones de servicio para la compra de gasolina y diésel, una realidad que hasta hace poco era ajena a la región.
“Es preocupante para el sector. Cada día se incrementan las filas para comprar gasolina o diésel en todos los surtidores. En Tarija no había filas, pero ahora se han agudizado”, lamentó Pérez, advirtiendo que la situación afecta el normal funcionamiento del transporte urbano, interprovincial y de carga, con repercusiones inmediatas en la distribución de alimentos y mercancías.
El dirigente recordó las recientes declaraciones del presidente del Estado, quien admitió que las dificultades para importar combustibles se deben a la falta de recursos económicos y la presión sobre las reservas internacionales. “Si no hay recursos para importar combustibles, estamos ante una emergencia que amenaza a todo el sector”, enfatizó.
La paradoja es evidente: Tarija, que por décadas aportó significativamente a la producción gasífera nacional, hoy padece escasez de combustibles, consecuencia de la caída sostenida en la producción de los megacampos gasíferos y la falta de inversiones para reactivar el sector hidrocarburos.
Expertos como Amilcar Taboada advierten que esta crisis puede encarecer los costos logísticos y el transporte de mercancías, presionando los precios de alimentos y bienes básicos en la región por ello es importante una nueva gobernanza del sector hidrocarburos en Bolivia y esto requiere cambios profundos. Pérez exigió una solución urgente: “Necesitamos una respuesta inmediata para garantizar el suministro y evitar que esta crisis continúe deteriorando la economía regional”.