Primer premio mundial para viticultoras de Camargo abre puertas para Bolivia

Las viejas vides centenarias que crecen entre el molle, el chañar y el algarrobo en el colorado cañón de Cinti, se vistieron de gala este 31 de marzo, cuando Old Vine Hero Award 2025 en Reino Unido, lanzó su veredicto al otorgarle el primer puesto, como campeones al Mejor equipo del mundo de “Héroes de la Viña Vieja 2025”.
“Todavía no lo podemos creer”, dijo Patricia Mendoza Morón, la gestora del proyecto Bodega Yokich que ganó como mejor equipo del mundo de Viticultura para la preservación de viñedos y cepas antiguas en el valle de Cinti, Chuquisaca, a tiempo de festejar con todo su equipo, conformado por mujeres en su mayoría.
“Nuestro equipo está conformado por mujeres quienes tienen mucha historia que contar y queremos dejarlo escrito para que las futuras generaciones tengan un pasado de base, para continuar trabajando en el presente y proyectarse a futuro”, manifestó emocionada.
“Las vides crecen en un clima estupendo, a 2406 mts de altura sobre el nivel del mar, a estas alturas tenemos una buena amplitud térmica entre el día y la noche con días calientes y noches muy frescas, hace que tengamos en nuestras uvas un buen equilibrio de acidez y color, y los aromas que se reflejan en nuestros vinos premium”, explicó.
“Tenemos un Banco Genético de cerca de diez hectáreas de vides criollas y patrimoniales de uva Misionera, Moscatel de Alejandría, Vischoqueña, Imporeña y Uvilla, Rosada Criolla, entre otras, para crear plantines, para que estas cepas no se pierdan y hacer vinos y singanis de alta gama”, expresa entusiasmada por el proyecto de impacto mundial.
Todas estas cepas son de la selección de la familia Mendoza Yokich y Morón, quienes subvencionan un gran porcentaje con la finalidad de expandir la viticultura de cepas Criollas y Patrimoniales en Cinti y Bolivia.
Impacto en el mundo
“Este galardón tendrá un impacto positivo en el posicionamiento global de la viticultura boliviana, destacando la Vitiforestería, además de validar la importancia de las cepas patrimoniales y criollas, brindando una plataforma internacional para promover vinos premium y la viticultura ancestral de Bolivia”, enfatizó Mendoza.
“La organización The Old Vine Conference está activa hace tres años y este es el tercer año que están premiando. Para Bolivia es un aliento que abre puertas y te hacen conocer a nivel mundial en el mundo del vino, hacen conocer tu proyecto, asistir a eventos y conocer mucha gente y abrir mercados. Es muy importante este premio”, aseveró.
A este logro, la enóloga Patricia Mendoza, explicó que se adjuntaría al dossier, una propuesta de Ley de protección y preservación de cepas viejas de 35 a 99 años y de cepas centenarias desde los 100 hasta más de 300 y algunas de 350 años, cuyas categorías están respaldadas por la Organización internacional de la Viña y el Vino (OIV) para que el sistema de cultivo boliviano denominado Vitiforestería esté garantizado con la conservación de estas viñas como parte esencial de la herencia cultural y genética de Bolivia, asegurando de esta manera, su preservación para futuras generaciones y protegiendo este recurso invaluable frente a los desafíos del cambio climático. Pasos necesarios para fortalecer la identidad vitivinícola de Bolivia asegurando la continuidad de las buenas prácticas vitícolas ancestrales.
¿Qué es la Vitiforestería?
La Vitiforestería es un sistema multiple en los que se alojan múltiples cultivos simultáneamente en la misma parcela en el Valle de Cinti. La viticultura ancestral combina árboles de la zona con la vid. Las vides centenarias crecen de preferencia enredándose en los molles, el chañar y el algarrobo, en otras viñas están también enredados en plantas de duraznos y ciruelos, dándole un sabor exclusivo a cada uva y por consiguiente al vino y al singani”.
“Es un museo al aire abierto, todo se hace de forma manual por lo que está desordenado, la vid se encuentra en convivencia con otros frutos, como la manzana, pera, duraznos, ciruelos, membrillos y algunos vegetales. En esta arquitectura de viñedo no se usan máquinas, también hay vides más jóvenes que se cultivan en sistemas de espalderas y el sistema a árbol que se llaman Parroneras, en su mayoría viejas e incluso centenarias. Las vides viejas dan menos frutos y se hacen vinos muy elegantes”, explicó.
“Muchas bodegas en Camargo, trabajan dentro de la denominación de origen bajo un ente regulador y sello de garantía, es importante que el visitador no se vaya sin conocer las bodegas y los viñedos antiguos de Camargo”, expresó a tiempo de invitar a la población que visiten Camargo, para conocer estas grandes particularidades.
Antecedentes
“De 90 suscriptos de 14 países que concursaron en The Old Vine Conference 2025, quedaron 60 suscritos que cumplían con los requisitos, luego el jurado seleccionó 5 países y nosotros hemos caído en la categoría de mejor equipo de viticultura, entre éstos: dos de España, uno de Estados Unidos, uno de Australia y uno de Bolivia. Otorgando el galardón mayor a Bolivia como mejor equipo del mundo de “Héroes de la Viña Vieja 2025”.
El equipo de viticultura galardonado como el mejor del mundo, fue reconocido en Inglaterra por su esfuerzo y compromiso en la preservación de Viñedos centenarios por manos de pequeños propietarios del Valle de Cinti, ubicado en el departamento de Chuquisaca y en los valles de Potosí, Bolivia.
Este equipo está conformado en su mayoría por mujeres propietarias como Sonia Zamora Márquez, Fanny Morón Lino, Dionicia Portal, Rebeca Cazón Aguirre, Mandina Buitrago, Nancy Ortega de Solano, las hermanas Rivera G., quienes, por generaciones preservaron el know-how del cultivo de la vid en parrales maridados principalmente con Chañar, también llamado Sofaique (Geoffroea decorticans); molle (Schinus Molle) y algarrobo conocido como Taco, con el propósito de crear conciencia en los viticultores sobre la importancia de los viñedos viejos como patrimonio genético, considerando el cambio climático y la resiliencia biótica y abiótica.
“Los españoles estaban muy contentos de que Bolivia ganó por la herencia que nos trajeron los religiosos hace 500 años”, expresó Patricia Mendoza, a tiempo de explicar que la bodega Yokich, perteneciente a su familia y la cual la lidera su madre junto a ella y sus hermanos, fue construida por los Jesuitas en la segunda mitad del siglo XVI.
“El Valle de Cinti, para mí, es el más antiguo en cepas viejas de Bolivia, hay cepas que llegan a 300 y 350 años. Las categorías son de 35 a99 años y los 100 años hasta 300 o más, algunos llegan a 350 años, expresó”.
Patricia Mendoza Morón
Patricia Mendoza estudió viticultura y enología en Italia en la Alma Mater Universitá Di Bolonia con sede in Cesena e hizo una maestría en espumantes en Inglaterra en la Royal Agricultural University RAU en Plumpton College y trabajó en varias bodegas en Italia e Inglaterra.
Es copropietaria de los viñedos y bodegas Yokich SRL y singani Tierra Alta, heredadas de su familia Mendoza Yokich y Morón y dirigida por su madre Fanny Morón Lino, Patricia, Marcela, Verónica, Ariel y Amanda Mendoza Morón.
Patricia cuenta que sus abuelos Arturo Mendoza y Mery Yokich y sus padres Renato Mendoza Yokich y Fanny Morón Lino, dedicaron sus vidas para proteger y salvaguardar el legado de la viticultura ancestral de Bolivia.
“Somos cinco generaciones que cuidamos estas cepas ancestrales y mi familia está compuesta por cinco mujeres y un varón”, finalizó.