Policías deberán pagar daño por la patrulla que chocaron
Fueron aprehendidos el martes los tres policías que chocaron un patrullero, enfrentan un proceso disciplinario y otro penal por cuatro delitos, incluyendo conducción peligrosa y daño a bienes del Estado. El Comando Departamental presentó una querella para que paguen la reparación del vehículo oficial que tiene apenas un año y medio de uso.
El comandante de Tarija, coronel Gregorio Illanes, apuntó que la camioneta que los funcionarios debían usar para tareas de seguridad ciudadana en la zona del Mercado Campesino, en realidad la emplearon para ir a emborracharse en un domicilio particular, abandonando sus funciones y poniendo en riesgo a otras personas.
“La camioneta es de la penúltima dotación de vehículos que hemos recibido, están conservados. Son bienes del Estado y tenemos que cuidar. Los malos servidores van a tener que asumir responsabilidad, (…) tienen que resarcir los daños”, exclamó.
Los sujetos fueron identificados como Brayan Angelo Vera, Weimar Calizaya y Carlos Miranda, todos con grado de sargento y dependientes de la Estación Policíal Los Chapacos.
Reporte
El director de Tránsito, coronel José Pacheco, detalló que los funcionarios comenzaron su turno el lunes a las 7:00 horas y se les ordenó hacer guardia en un punto fijo. Más tarde los enviaron a entregar una citación y después, en lugar de volver a su puesto, se fueron a beber.
La hora del relevo era a las 13:00, pero para ese entonces los tres se encontraban “en completo estado de ebriedad”. Aun así, abordaron la patrulla para volver a la EPI, pero al pasar por la calle Cañada Strongest chocaron contra una vagoneta azul, la cual sufrió un vuelco lateral.
“Lo más grave es que abandonaron el lugar omitiendo el auxilio a posibles heridos”, aseveró, al indicar que tampoco se reportaron a sus superiores, dejaron la camioneta en un taller mecánico y huyeron.
Proceso
Los tres policías no se presentaron hasta las 7:00 de este martes. Posteriormente, el Ministerio Público emitió su orden de aprehensión y se los imputó por destrucción de bienes del Estado, uso indebido de bienes, omisión de socorro y conducción peligrosa. Su situación legal se definirá en una audiencia cautelar.
El comandante Illanes declaró que fue él mismo quien presentó la denuncia ante la Fiscalía y ordenó la querella contra estos uniformados. Paralelamente, se inició un proceso disciplinario para que los tres involucrados reciban una sanción administrativa al interior de la institución verde olivo.
“Indicar a la sociedad civil que no vamos permitir que ningún servidor público policial realice estos actos que atentan contra la imagen y el prestigio de la institución. Tendrán que asumir toda la responsabilidad del hecho de tránsito”, aseveró.
Fuente: El País