Nueve ciudades marcharon por la democracia; el MAS atacó la protesta pacífica en La Paz
La convocatoria de los comités cívicos, Conade, las plataformas y los partidos de oposición tuvo repercusión en las nueve ciudades capitales del país. En la ciudad de La Paz se realizaron dos marchas y ambas fueron atacadas por los grupos de choque afines al Gobierno.
Las concentraciones en las nueve capitales de departamento dieron paso a las marchas desde los puntos acordados previamente. No hubo ningún problema en las ocho ciudades. Santa Cruz, Cochabamba, Oruro, Potosí, Tarija, Sucre, Trinidad y Cobija se movilizaron con normalidad. Solo en el caso de La Paz se produjeron desmanes que incluso provocaron agresiones a periodistas que cubrían las marchas.
En Cochabamba, cuyo Comité Cívico, no convocó a la marchar, unas 2.000 personas se reunieron en la plaza de las Banderas e iniciaron su columna hacia la plaza 14 de Septiembre. “Liberen a Camacho” era el grito que coreaban los asistentes a esta columna al llegar a la plaza principal.
La presidenta del Comité Cívico de Potosí, Roxana Graz, dijo que la marcha era una forma de condenar el abuso policial. También una protesta contra la persecución judicial y la libertad de todos los detenidos políticos del país. La marcha llegó hasta la plaza 14 de Noviembre con gritos contra el Gobierno.
Oruro, Tarija, Sucre también realizaron marchas similares, con plataformas y representantes del Conade encabezando las mismas. En ninguna de estas regiones se produjo enfrentamientos y la protesta concluyó con el discurso de los principales responsables.
En Beni, la protesta no solo fue en la capital, Trinidad. Guayaramerin, Riberalta y Rurrenabaque también salieron a marchar pidiendo, “democracia y libertad”, que era el coro general de los marchistas.
En Cobija no hubo marcha. La movilización se realizó mediante una caravana de vehículos que se concentraron en el “mojón de la autonomía” y luego recorrieron con bocinazos las calles de la ciudad. El cívico Joyner Calpiñeiro encabezó la caravana de vehículos.
En La Paz, el panorama fue distinto. Se realizaron dos marchas y ambas fueron atacadas; una en la calle 21 del barrio de Calacoto y otra en la plaza Avaroa. El MAS también dividió a sus fuerzas con dos contramarchas que se dedicaron a hostigar estas movilizaciones. Estos grupos contaban con gran cantidad de petardos para atacar a los movilizados y obligarlos a su dispersión.
En ambos lugares hubo agresiones, no solo a los movilizados sino a los periodistas que cubrían los hechos. Los atacantes no midieron consecuencias y lanzaron indiscriminadamente los petardos contra los que estuvieran frente a ellos.
Fuente: EL DEBER