Más de 58.000 palestinos han muerto en Gaza a causa de la ofensiva israelí, según el ministerio de Sanidad gazatí

“¡Cierren el acuerdo de alto el fuego a cualquier precio! ¡Detengan este genocidio, detengan este genocidio!”, gritaba Mohamed Matar, testigo de los ataques israelíes de la madrugada y la mañana de este domingo.
“Nos morimos de hambre, sed, frío, calor, falta de agua y de alimentos. Y con todo esto, sigue habiendo gente muriendo y mártires, ¿y ustedes, árabes, siguen mirando? ¡Movámonos! ¿Dónde está la conciencia? ¿Dónde está la nación islámica?”, expresó Matar, citado por la agencia Reuters.
En cuanto al número de víctimas, en la mañana del domingo solo la agencia de noticias AFP había difundido un desglose detallado de los datos.
Con los primeros rayos del sol, los palestinos en la Ciudad de Gaza buscaron entre los escombros sobrevivientes, luego de un ataque israelí nocturno que alcanzó una casa cerca de un mercado y que provocó la muerte de 10 palestinos, entre ellos mujeres y niños, según la agencia.
En el campo de refugiados de Nuseirat, en el centro del enclave, 20 personas murieron, entre ellos 10 niños. “Nos despertó el sonido de dos enormes explosiones. Vimos a nuestro vecino, Abu Jihad Al-Arbid, y a sus hijos bajo los escombros de su casa bombardeada”, dijo a la AFP Khaled Rayan, residente de la zona.
Además, otro ataque cerca de un punto de distribución de agua potable y uno más contra el campo de desplazados de Al-Mawassi (al sur) dejaron tres muertos.
La Defensa Civil local, citada por AFP, contabilizó 43 palestinos muertos, incluidos niños, en las últimas 24 horas.
La ofensiva de Israel sobre la Franja de Gaza comenzó tras el ataque del 7 de octubre de 2023, cuando Hamás llevó a cabo una incursión armada en el sur de Israel que dejó 1.200 muertos y 251 personas secuestradas, según el gobierno israelí. Desde entonces y hasta la fecha, el ministerio de Salud gazatí afirma que han sido asesinados 58.026 palestinos en la Franja de Gaza.
En los hospitales, se ubican los cuerpos en el suelo, algunos cubiertos de sangre. Allí sus familiares se despiden en un improvisado funeral. En imágenes, difundidas por AFP, se observan madres llorando junto a niños heridos que recibían atención médica.
La retirada militar, en el centro de la disputa
Las conversaciones para lograr un alto el fuego en Gaza están estancadas y las partes divididas, dijeron el sábado fuentes palestinas e israelíes familiarizadas con las negociaciones que iniciaron en Doha el 6 de julio.
En lo medular, lo que impide el cierre del trato, es la disputa sobre la retirada militar israelí y la logística de la ayuda humanitaria, que podrían descarrilar los esfuerzos para poner fin a la guerra y liberar a los rehenes restantes.
Sin embargo, una fuente israelí, citada por Reuters, dijo que el sábado continuaron las conversaciones indirectas para la tregua de 60 días.
Medios locales israelíes han informado que Hamás rechaza la presencia israelí en el corredor Morag, al sur del enclave, y la expansión de la zona de amortiguación. En su intento por lograr la tregua, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, mantendrá una reunión de seguridad con altos funcionarios sobre las conversaciones de Doha, con el foco puesto en el eventual redespliegue de tropas en Gaza.
Canal 12 de Israel dijo que Israel planea presentar mapas actualizados que describen su presencia militar planificada a lo largo del Corredor Morag y el perímetro de la Franja, después de que Qatar le dijera a Israel que Hamás rechazó la oferta anterior.
Bezalel Smotrich, ministro de finanzas, y el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, participarán en esta reunión, prevista para la noche de este domingo. Ambos, junto con miembros de sus partidos políticos, son los principales opositores a un acuerdo que conduciría a la liberación de los rehenes aún retenidos en Gaza y al fin de la guerra en Gaza.
En Israel han señalado a los dos ministros como responsables de que se hayan aplazado, en el pasado, acuerdos de alto el fuego, por su presión para continuar con la guerra; de lo contrario, abandonarían la coalición de Gobierno de Netanyahu.
Por ello, medios locales israelíes aseguran que el primer ministro de Israel intentará, en esta reunión, “suavizar la oposición de los ministros del gobierno de extrema derecha”.
Sin embargo, también enfrenta las presiones de Trump, que fue el que anunció este último intento de alto el fuego y espera que el conflicto pare.
Más divisiones internas
Días atrás, desde el Gobierno israelí se propuso una “ciudad humanitaria” construida sobre las ruinas de Rafah, en el sur de Gaza.
Una fuente palestina, citada por AFP, dijo que el objetivo de Israel es "aglomerar a cientos de miles de personas desplazadas" en el sur de Gaza, "como preparación para un desplazamiento forzado de la población a Egipto u otros países".
El medio israelí ‘Yediot Ahronot’ informó que la “ciudad”, destinada a albergar hasta 500.000 personas, tendría un costo aproximado de entre 2.700 y 4.000 millones de dólares. Lo que ha desatado fuertes críticas dentro del estamento de defensa israelí porque, explica el medio, de prosperar el plan, Israel asumiría inicialmente la mayor parte del costo.
El primer choque fue con el jefe del Estado Mayor del Ejército de Israel, Eyal Zamir, que cuestionó que los recursos asignados a la preparación de la zona están mermando la capacidad operativa del ejército en la lucha contra Hamás.
FUENTE: FRANCE 24