Los incendios arrasaron 3,8 millones de hectáreas en Bolivia, una superficie mayor que la de Israel y equivalente al departamento de Tarija

Los incendios arrasaron 3,8 millones de hectáreas en Bolivia, una superficie mayor que la de Israel y equivalente al departamento de Tarija

El ministro de Medio Ambiente y Agua, Álvaro Ruiz, informó que hasta septiembre de 2025 se registraron 200 hectáreas menos que  los más de 4 millones de hectáreas quemadas del año pasado lo que implica que mínimo son 3,8 millones de hectáreas afectadas por incendios forestales en Bolivia, una cifra apenas menor 

Pese a que la autoridad destacó una “reducción” respecto a 2024, expertos y organizaciones ambientales advierten que se trata de un desastre de enormes proporciones que no puede presentarse como un logro.

El presidente Luis Arce visitó el sábado el Centro Nacional de Monitoreo de Incendios y sobrevoló las zonas críticas en Santa Cruz, donde se concentra la mayor parte de la superficie devastada. Ruiz señaló que la coordinación entre Fuerzas Armadas, bomberos voluntarios, municipios y gobernaciones permitió contener el avance del fuego en varias regiones, pero reconoció que aún se reportan incendios activos.

Un territorio arrasado: la magnitud del desastre

Los 3,8 millones de hectáreas quemadas equivalen a toda la superficie del departamento de Tarija o, en comparación internacional, son más grandes que la superficie de países como El Salvador o Israel. La pérdida incluye bosques, sabanas y pastizales, lo que implica un golpe irreparable para la biodiversidad, el agua, los suelos y los medios de vida de comunidades indígenas y campesinas.

En regiones como la Chiquitanía y el Chaco boliviano, o la cordillera de Sama el fuego ha destruido ecosistemas únicos y dejado a miles de familias expuestas a contaminación del aire, escasez de agua y pérdidas económicas. Ambientalistas señalan que, además del daño ecológico, las emisiones de carbono contribuyen a agravar la crisis climática.

Procesos y deudas pendientes

Ruiz informó que se iniciaron 17 procesos penales contra responsables de incendios, pero organizaciones cuestionan que en años anteriores la mayoría de estos procesos quedaron archivados sin sanciones reales, lo que fomenta la impunidad.

Críticas al discurso oficial

Para los defensores del medio ambiente, presentar los 3,8 millones de hectáreas arrasadas como un avance respecto a 2024 constituye un error grave.

“Que el Gobierno intente mostrar como un éxito que se queme un territorio equivalente a todo un departamento revela la falta de comprensión de la magnitud del problema. Esto no es un triunfo, es una catástrofe nacional”, advirtieron plataformas ciudadanas en Santa Cruz.

El reto estructural

Más allá de la reacción ante las emergencias, especialistas recuerdan que Bolivia sigue sin una política clara de prevención y ordenamiento territorial, donde el uso del fuego para ampliar la frontera agrícola continúa siendo una de las principales causas.

“Mientras no se regulen los chaqueos y se refuercen los mecanismos de sanción, cada año estaremos lamentando millones de hectáreas arrasadas”, concluyeron. Con información de ABI y plataformas. 

FUENTE: PLATAFORMA AMBIENTAL