La indiferencia deshumanizada ante el crimen de Kamila puede ser parte del trauma nacional de hogares violentos y la impunidad

En Bolivia las mujeres son supervivientes desde niñas.

La psicóloga consultada por este medio expresa su preocupación por la indiferencia ante el feminicidio de Kamila Pacassi, señalando que esta insensibilidad puede estar profundamente arraigada en el trauma colectivo de la sociedad boliviana. 

Comenta que muchos de los jóvenes que fueron testigos de este acto sin haber hecho nada para defenderla, pueden haber crecido en hogares violentos, donde presencian agresiones familiares, y esto podría explicar en parte su reacción deshumanizada. Esa paralización puede ser de trauma.

Según la psicóloga, vivimos en una sociedad traumatizada, donde aquellos que deberían proteger y dar ejemplo, como padres y autoridades, son muchas veces los mismos perpetradores de violencia, gozando de impunidad.

Además, enfatiza la falta de respeto hacia los más vulnerables: niños, mujeres, ancianos y hasta la naturaleza, con una indiferencia hacia la vida y la muerte masiva.

Esta observación subraya cómo el trauma, el abandono y la impunidad perpetúan una cultura de violencia y desdén por la vida humana.