China deja de comprarle soja a Estados Unidos para importarla desde Brasil

Lula da Silva con Xi Jinping en la visita del presidente brasileño a China

La tensión comercial entre Estados Unidos, Brasil y China escaló en agosto tras la decisión de Donald Trump de imponer aranceles del 50% a las exportaciones brasileñas. La medida, que afectó a cientos de productos con acero y aluminio, generó un inmediato efecto colateral: Beijing salió en defensa de su aliado sudamericano, aumentando las compras de soja brasileña y argentina, en detrimento de los agricultores estadounidenses.

China aumenta la importación de soja brasileña y argentina

Según datos oficiales, en julio las importaciones chinas de soja procedente de Brasil crecieron 13,9% en un solo mes, consolidando un negocio de miles de millones de dólares que fortalece al agro brasileño.

Argentina también resultó favorecida: China adquirió 561.030 toneladas de soja en julio, lo que representa un incremento del 104% respecto al año anterior.

En contraste, los productores estadounidenses enfrentan una caída del 11,5% en sus ventas al exterior, lo que provocó que enviaran una carta a Trump solicitando una rápida solución a la crisis comercial.

Impacto de los aranceles en Estados Unidos

Los agricultores norteamericanos advirtieron que la política arancelaria los deja en una posición insostenible:

  • Perdieron clientes históricos en China.

  • Brasil puede cubrir la demanda gracias a su alta producción agrícola.

  • Los contratos firmados entre Beijing y Brasil aseguran el suministro en los próximos meses, desplazando a Estados Unidos.

“No podemos sobrevivir a una disputa comercial con nuestro mayor cliente”, advirtieron los productores en su carta.

Consecuencias políticas en Brasil

El respaldo chino a Brasil llega en un momento crítico para el presidente Lula da Silva, quien enfrenta tensiones políticas internas por los ataques del “trumpismo” contra la Corte Suprema de Brasil.

El magistrado Alexandre de Moraes, responsable del juicio contra Jair Bolsonaro por el intento de golpe del 8 de enero de 2023, fue sancionado por Estados Unidos bajo la Ley Magnitsky, que bloquea sus operaciones financieras y genera presión sobre entidades bancarias brasileñas.

El efecto inmediato fue un fuerte movimiento en el mercado de acciones de São Paulo, donde varios bancos sufrieron pérdidas que arrastraron a la Bolsa de Valores brasileña.

Un conflicto con repercusiones globales

La disputa muestra cómo la geopolítica agrícola y financiera se entrelaza con la lucha por la influencia internacional. Mientras Trump endurece sanciones, China consolida su rol como socio estratégico de Brasil y Argentina, redibujando el mapa del comercio global de granos.
FUENTE: PERFIL